Un hincha de Independiente fue atacado por un grupo de simpatizantes de Santos en la previa del partido de vuelta por los octavos de final de la Copa Libertadores.
El hecho se produjo en las adyacencias al estadio Pacaembú, en San Pablo.
Lamentablemente, el recibimiento hostil de parte de los simpatizantes brasileños a los argentinos ya es parte de la cotidianidad. En diciembre del año pasado, Independiente también tuvo serios inconvenientes cuando viajó a Río de Janeiro para la final de la Copa Sudamericana.
Aquella vez cientos de fanáticos del Flamengo atacaron el hotel en el que se concentraba la delegación del Rojo, en Barra da Tijuca, y "cazaron" a los hinchas de Independiente que estaban en la ciudad.
El plantel, que llegó ayer a Brasil, pasó una noche muy dura, donde varios de los jugadores del plantel que conduce Ariel Holan no pudieron dormir por los fuegos artificiales que tiraron los locales.
Héctor Maldonado, secretario general de Independiente, se refirió al tema: "Fue una vergüenza".
La decisión de la Conmebol de darle por ganado 3 a 0 el partido de ida a Independiente generó demasiado malestar en Santos. La comisión directiva de Independiente está preocupada por la salida de los hinchas una vez que termine el partido.
