Lo investigaron por el escape del “Porteño” Luzi, fue preso y ahora será intendente en Córdoba

Sebastián Argañaraz es un hombre que fue investigado por haber colaborado en el escape de Martín el “Porteño” Luzi de la cárcel de Bouwer en 2005. Luego de haber estado preso por 117 días, se probó su inocencia, fue liberado y ahora será intendente de San Francisco del Chañar, provincia de Córdoba.

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“Un tío me pidió que maneje un camión porque el chófer había tenido un problema. Tenía que manejar nomás”, recordó el hombre, en diálogo con El Doce, que emprendió el viaje rumbo a La Rioja. Pero lo detuvieron a la altura de la localidad de Serrezuela.

Aquel camión Chevrolet azul estaba lleno de cajones de verduras y mercadería que para “La Gran Feria Persa”, en San José de Vinchina. Pero entre medio, las autoridades que controlaron el camión encontraron pelucas, armas y hasta una carta de la hija de Luzi para su padre.

LO ACUSARON DE SER CÓMPLICE DE “LUZI” Y SERÁ INTENDENTE

A Argañaraz le atribuyeron los delitos de tenencia de municiones de guerra y robo calificado con arma de fuego operativa.Finalmente, se probó su inocencia y fue desafectado de la causa que está archivada en los Tribunales provinciales.

Luego de una estadía, donde vio “realidades de todo tipo que te hacen mejor persona”, según sus palabras, cambió su reputación y será intendente desde el 10 de diciembre en San Francisco del Chañar gracias a los 1.145 votos obtenidos, representando a Juntos por el Cambio.

QUIÉN ES EL “PORTEÑO” LUZI

Martín “el Porteño” Luzi volvió a ser detenido en Córdoba, diez meses después de recibir la libertad condicional. Lo descubrieron en un Audi Q5 robado, con un arsenal y un chaleco antibalas de la Policía en su poder. Integraba una banda de delincuentes donde dos de los integrantes tenían frondosos antecedentes y pedido de captura.

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En este marco, volvió a salir a la luz la historia de su escape de la cárcel de Bouwer, a la que el Gobierno de Córdoba señalaba como “la más segura del país”. El hecho, ocurrido en agosto de 2005, dejó en evidencia las fallas de un sitio alejado con una compleja red de portones eléctricos, con dos alambrados perimetrales, torretas con guardias armados y un interminable descampado liso.