Demolieron las viviendas que habían hecho los mapuches en las tierras usurpadas de Villa Mascardi

Tras as usurpaciones mapuches llevadas a cabo en Villa Mascardi, estos grupos construyeron seis viviendas con madera y demás materiales robados. Dichos inmuebles representaban un gran riesgo de derrumbe, y por disposición de la jueza Silvina Domínguez, el sábado 15 fueron derribadas.

El Estado les ofreció tierras a los mapuches de Villa Mascardi, pero las rechazaron y volvieron a atacar

Estas estructuras fueron construidas por la comunidad originaria Lafken Winkul Mapu. Cabe destacar que hay otros edificios en Parques Nacionales, Gas del Estado y el obispado de San Isidro que por su estado de deterioro podrían tener el mismo final.

Según informó Infobae, a lo largo de la semana, efectivos de las fuerzas federales del Comando Unificado retiraron las pertenencias de las familias que vivían en esos domicilios. Todos los elementos recolectados quedaron “bajo resguardo judicial”.

Las viviendas de mapuches en Villa Mascardi fueron construidas con materiales robados

Luego de difundir el registro fotográfico de las viviendas que fueron demolidas, se pudo determinar que fueron construidas mayormente con materiales que sustrajeron del viejo hotel IOS, en Parques Nacionales, donde se preveía la instalación de la Escuela de Guardaparques.

La magistrada federal Domínguez, junto a la fiscal subrogante de la ciudad, Cándida Etchepare, elaboró una serie de informes donde advierte que la estructura del edificio no es segura. Cuenta con un deterioro muy avanzado.

Es por este motivo que estiman que dicho sitio también podría ser derrumbado. Si bien desde Parques Nacionales se negaron a que esto ocurra, están a la espera de la orden de la jueza.

Entre tanto, las estructuras que ya fueron derrumbadas estaban construidas por estas agrupaciones mapuches. Constaban con madera y chapas, y se ubicaban en distintos sectores de los dos lotes que fueron usurpados en 2017, así como también en otros predios.

Además, contaban con servicio de energía eléctrica. Esto era posible gracias a una conexión clandestina que habían realizado los integrantes de esa comunidad desde una línea de media tensión.

Según detalló el medio, esta alimentaba a otras viviendas del paraje. También a un establecimiento educativo rural, un destacamento policial y a un complejo de camping situado en las inmediaciones, entre otros.