Un hecho insólito sucedió en la localidad de Olten, Suiza, cerca de Zurich y Basilea, donde el pasado lunes 17 de agosto se vivió una lluvia de chocolate. Sí, tal como suceden en las películas, pero esta vez en la vida real.
En la localidad se encuentra ubicada una fábrica de chocolates llamados Lindt, sin embargo, el último tiempo vivió un imperfecto técnico en la ventilación de una de las máquinas que provocó que la ciudad amaneciese cubierta por una fina capa de chocolate.
Desde SDPNoticias, confirmaron que los responsables de la marca contaron que el error fue en la línea de "nibs de cacao tostados", que son pequeños trozos de granos de cacao triturados, que sumados con el viento, provocaron que se esparciesen por Olsen.
De esta manera, tras dispersarse el chocolate en la ciudad y provocar una lluvia inesperada de comentarios, la empresa ha ofrecido pagar por la limpieza necesaria del sitio.
No obstante, la producción de la fábrica pudo continuar con normalidad ya que las partículas eran completamente inofensivas.
