La ola celeste inundó las calles con multitudinarias caravanas en los tres departamentos del sur mendocino.
Agrupaciones pro vida, iglesias evangélicas, católicos y laicos unieron fuerzas y marcharon por las principales avenidas con banderas Argentinas, globos celestes y pancartas con leyendas como “Si a las dos vidas”, “toda vida vale”, “no al aborto”, “el Congreso ya dijo no al aborto en 2018”, “no, es no”, “aborto es fracaso”, “Marcho por las mujeres por nacer y que nadie defender”.
Minutos después de las cinco de la tarde, cientos de automóviles, gente en moto y bicicletas y gente de a pie se pusieron en marcha para demostrar que se oponen rotundamente a la legalización del aborto en el país.
Representantes de más de 40 entidades, iglesias y organizaciones sociales conformaron Causa pro vida San Rafael y se encargaron de organizar la manifestación que reunió a unos 1.000 vehículos más la gente que se plegó a pie o en bicicleta.
La caravana inició en la rotonda de la Copa y cruzó todo el centro de la ciudad hasta finalizar en la otra punta, en la rotonda del Mapa. En ese punto se sumaron otros tantos vecinos que llegaron caminando.
“Es una tarde histórica porque generaciones que tienen la misión e transformar este país dependen de lo que estamos haciendo acá”, comentó el pastor Víctor Doroschuk que participó de la caravana en tierras sanrafaelinas.
“No hay derecho a matar y si tenemos el deber de proteger toda vida. El aborto, díganle como quieran, pero al final sigue siendo lo mismo, un asesinato”, dijo casi a los gritos Lucía Fernández.
En Alvear el recorrido inició en el boulevard de la Vida y la Familia y concluyó con un acto en la plaza central de la ciudad. Primero marcharon familias caminando, detrás se acopló una agrupación gaucha y cerraba la columna la caravana de vehículos. Los organizadores estimas que hubo más de 3.000 personas.
Al igual que ocurrió dos años atrás, el intendente Walther Marcolini ya había dado su apoyo a la causa celeste. “El Municipio bajo mi gestión siempre va a tener la misma postura, favor de las dos vidas. El envío del proyecto de legalización del aborto es extemporáneo y es un debate que viene a tapar cuestiones políticas. Como se dice, viene a generar una cortina de humo”, sostuvo el jefe comunal alvearense.
“Desde marzo el presidente Alberto Fernández se cansó de decirnos que hay que priorizar la vida entonces es una fuerte contradicción porque con esto se está afectando el derecho que tiene el niño por nacer”, agregó Marcolini.
Ya en 2013 por decreto municipal se declaró a General Alvear “Departamento Pro-Vida” mientras que en junio de 2018, el Concejo Deliberante sancionó una resolución declarando al departamento “en contra del aborto”.
El diputado alvearense Gustavo Majstruk también fue parte de la manifestacion y reafirmó su postura pro vida “junto a millones de argentinos nuevamente salimos a reafirmar que la vida no se debate, se defiende”, posteó en las redes sociales y lo acompañó con una foto en el vehículo junto a la familia antes de iniciar la caravana.
“Que nos pasó como sociedad que debemos estar acá. Toda vida debe acompañarse desde el primer instante, debe cuidarse. Una vida no se juzga se acoge y hay que respetarla en cualquier circunstancia. No hay derecho a cortar una vida”, fue parte del testimonio que ofreció Evangelina Perfumo, madre de ocho hijos, en General Alvear.
En Malargüe arrancaron con un abrazo simbólico al hospital y luego y se dirigió luego por avenida Roca al este para después recorrer las arterias más transitadas de la ciudad. Numerosas familias dentro de sus autos ratificaron el por qué Malargüe es pro vida por ordenanza municipal.
“Otra vez estamos en la calle diciendo que no queremos el aborto, ya lo dijimos en 2018 y lo volvemos a repetir. En este año que tanto se habló de defender la vida no puede ser que envíen un proyecto para matar a los más indefensos, a los niños por nacer. Toda vida vale”, lanzó María Pérez, una vecina de Malargüe.
La caravana fue organizada desde “Malargüe por la vida y la familia”, que reúne a más de 50 organizaciones de distintos credos religiosos, partidos políticos y ciudadanos independientes.
