Fin de la polémica: el comercio definió el horario de atención

Con excepción de centros comerciales y shoppings, los locales abrirán sus puertas en horario partido.

Comercio de San Juan
Comercio de San Juan

Después de muchas idas y vueltas y posiciones enfrentadas entre comerciantes y trabajadores, el Centro Comercial de la Ciudad de San Juan unificó criterios y determinó que los locales comerciales sanjuaninos deberán abrir sus puertas en horario partido.

A través de un comunicado, la entidad que agrupa a los comerciantes informó que el horario de atención de lunes a sábado será de 9 a 13 y de 17 a 21 horas, con la excepción de shoppings y centros comerciales, que serán los únicos habilitados para atender en horario de corrido y lo harán de 11 a 21 horas.

Según detalló Diario Huarpe, desde el Centro Comercial aseguraron que alcanzaron esta decisión "en virtud de lo que se ha consensuado con el Comité COVID-19 de la provincia y de la opinión de la mayoría de los comerciantes de la Ciudad de San Juan.

En el comunicado consignan asimismo que el horario partido está contemplado en la Ley 11.544 referida a la jornada de trabajo y la Ley de Contrato de Trabajo 20.744, actualmente en vigencia.

Además la entidad utilizó como argumento el calor reinante en la provincia durante el verano, asegurando que "el clima cálido y el sol de San Juan en época estival obliga a efectuar un corte en el horario de trabajo en las horas pico de temperatura y radiación solar".

Para finalizar, el comunicado aclara que la decisión de implementar el horario partido se tomó en forma consensuada entre la mayoría de los comerciantes y asociados, para lo cual realizaron consultas y relevamientos.

Por su parte, desde el Sindicato de Empleados de Comercio (SEC) impulsaban la continuidad del horario de corrido implementado por los protocolos sanitarios como consecuencia de la pandemia.

Los trabajadores consideran que el horario de corrido no solo es más cómodo para ellos, sino que además colabora con las medidas preventivas para evitar la propagación del coronavirus, ya que esta práctica les permitía hacer un uso menor del transporte público.