El Hospital del Niño Jesús en Tucumán realizó un taller de expresión corporal para fomentar la conciencia sobre educación especial, especialmente durante el mes de la educación especial. La actividad buscaba visibilizar las acciones emprendidas en el marco de la educación inclusiva y el trabajo en instituciones de educación especial.
El taller permitió a los padres experimentar el desarrollo corporal de sus hijos, desde el nacimiento hasta el primer año de vida. La psicóloga Daniela Ayudarte destacó que esta iniciativa forma parte de una serie de actividades realizadas durante todo el mes para promover la conciencia sobre educación especial.
La psicóloga del Centro de Estimulación Temprana del Hospital del Niño Jesús, licenciada Daniela Ayudarte, detalló que se viene trabajando durante todo el mes de octubre se realizaron distintas actividades resaltó que durante todo el mes se estuvo haciendo una serie de actividades con la idea de visibilizar las acciones que se emprenden en el marco de la educación inclusiva y cómo se viene trabajando en las instituciones que corresponden al área de educación especial.
“Esta es la semana donde se concentró la mayor cantidad de actividades. Por convenio biministerial entre Educación y Salud ayer estuvimos con la Escuela Campo de las Carreras haciendo unas jornadas inclusivas; habrá también con el jardín de infantes Gotitas de Rocío; hoy se desarrolló el taller de padres y tenemos el cierre de la semana el día viernes, que es una kermes de juegos interactivos que se realizará en el Parque Provincial de 8 a 13 horas”, dijo la profesional.
El Área de Estimulación Temprana del nosocomio cuenta con un equipo conformado por con docentes, maestras estimuladoras, kinesiólogo, fonoaudiólogo, entre otros. La especialista en Desarrollo Infantil Temprano, Cynthia Herrera, indicó que el objetivo del taller era que los padres pudieran compartir y vivenciar el trabajo físico durante las terapias físicas de sus hijos.
En este aspecto, Herrera destacó: “Fue algo muy gratificante, recordemos que sus hijos son niños con discapacidad, que muchas veces ellos tienen que reorganizar la casa para poder asistir a estos talleres, entonces que puedan asistir a estos talleres que son exclusivamente para ellos, fue muy significante, de mucho aprendizaje, muchas emociones, porque es poner el cuerpo y sentir lo que sus hijos sienten”.
“Como servicio de estimulación temprana, la familia es parte del tratamiento. Los adultos cuidadores son los pilares principales en la atención temprana o la estimulación temprana. Entonces, que ellos se lleven recursos para poder llevar esto al hogar y transmitirlo a los otros miembros de la familia es algo muy valioso”, concluyó la profesional.