Prisión preventiva para el hombre torturó y mantuvo sin comer una semana a su pareja

Fue imputado de múltiples delitos entre los que se encuentra el abuso sexual y la reducción a servidumbre. El caso ocurrió en Rafaela.

Rescataron a una mujer de 40 años que estaba con varias costillas fracturadas y llevaba una semana sin comer en una villa de Rafaela. (@MinSegSF)
Rescataron a una mujer de 40 años que estaba con varias costillas fracturadas y llevaba una semana sin comer en una villa de Rafaela. (@MinSegSF)

Después de la conmoción que causó en Rafaela el caso de una mujer que pasó una semana encerrada, sometida a torturas, abusada y sin comer, la justicia provincial imputó a la pareja de la víctima y le dictó prisión preventiva sin plazo.

El hombre, que también violó a la hija de su mujer, tiene 48 años y quedó detenido en el marco de la investigación que encabeza la fiscal Ángela Capitanio por el sometimiento físico y psicológico que sufrió una mujer en Rafaela.

Los delitos que le imputó la fiscal JLC fueron reducción a la servidumbre; lesiones graves dolosas agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género; y abuso sexual agravado por acceso carnal.

Además, se le atribuyó al hombre la autoría del delito de abuso sexual simple agravado (por el aprovechamiento de la convivencia preexistente) en perjuicio de la hija de su pareja. En tal sentido, los delitos contra ambas mujeres fueron atribuidos en concurso real.

Las imputaciones sugeridas por la Fiscalía fueron aprobadas por el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Alejandro Mognaschi, en el marco de una audiencia llevada a cabo este viernes.

"En un primer momento vivieron en un campo situado en la localidad de Sarmiento en el departamento Las Colonias, y luego se trasladaron a una vivienda ubicada en el asentamiento Villa Sur en la ciudad de Rafaela", precisó Capitanio. "Desde que comenzó la convivencia, el hombre redujo a servidumbre a la mujer y la sometió psicológica y físicamente: decidía las circunstancias de tiempo, modo y lugar en que ella transcurría su vida", agregó.

La fiscal Capitanio manifestó que el imputado "decidía cómo y cuándo debían tener relaciones sexuales –incluso contra la voluntad de la víctima–; resolvía cuándo la mujer podía salir o quedarse en la vivienda y con quién se podía relacionar. Además, se apoderó de su documento y de su tarjeta de débito de cobro de asignaciones familiares, por lo que disponía de sus ingresos económicos", manifestó.

"Como si fuera poco, también la privó de comunicarse libremente con su entorno familiar, laboral y social; y la obligó a realizar trabajos domésticos cuando su estado de salud no se lo permitía a raíz de los golpes que él mismo le había propinado", añadió la funcionaria del Ministerio Público de la Acusación (MPA).

La fiscal sumó que "las agresiones fueron de tal gravedad que, de acuerdo a lo constatado el martes de esta semana, la mujer tenía hematomas, golpes, escoriaciones y contusiones en el rostro y en distintas partes del cuerpo; lesiones internas; múltiples fracturas costales bilaterales, algunas de ellas con desplazamiento; fractura del pómulo y de la zona pélvica".

Por último, Capitanio informó que “en este contexto, el imputado también cometió delitos contra la integridad sexual en perjuicio de la hija de su pareja, una adolescente menor de edad”.