El Tribunal pluripersonal integrado por la Jueza Cristina Fortunato y los conjueces Nicolás Rogiani y Cecilia Álamo condenó a 10 años de prisión a Adolfo Luis “Patito” San Lorenzo. Luego de la condena, allegadas al delincuente agredieron a Ángela Capitanio, la fiscal que lo acusó de ser autor de cuatro hechos ilícitos.

De acuerdo a lo que se pudo saber, cuando la mujer del Ministerio Público de la Acusación se retiraba del lugar, cerca de las 11, fue agredida por dos mujeres, aparentemente familiares del sujeto sobre quien pesó la sentencia. Primero, fueron insultos. Pero después, se pasó a la violencia física. Ambas fueron detenidas y el Fiscal Martín Castellano llevará la audiencia imputativa. Vale agregar que se les secuestró la moto con la que habían concurrido al lugar.

Según la Justicia, San Lorenzo fue culpable de “explotación económica de la prostitución ajena calificada (por violencia, situación de vulnerabilidad, convivencia y por la edad de la víctima)”, “violación de domicilio, coacción agravada (por el uso de arma de fuego) en concurso real con lesiones leves agravadas (por el vínculo”), “daño en concurso real con coacción” y de “robo calificado (por el uso de arma de fuego cuya aptitud para el disparo no pudo acreditarse)”, todo en calidad de autor.

El primero de los hechos ocurrió en 2003 y durante 15 años, se mantuvo el sometimiento, hasta enero de 2018, momento en que quien era también su pareja y madre de su hijo, se pudo escapar. Al día siguiente de que se fue de la casa en donde convivían, el condenado ingresó sin autorización a la vivienda que fue el refugio y golpeó a su expareja y a su hijo. Asimismo, en octubre de ese mismo año, volvió a ese mismo lugar y luego de dañar algunos objetos de la casa, quiso prender fuego la vivienda. Finalmente, se lo encontró culpable de un robo ocurrido en Av. Brasil al 600, realizado en compañía de otro hombre, que no fue identificado.

Repudio del MPA y del Colegio de Magistrados

Por la tarde, el Ministerio Público de la Acusación emitió un comunicado en donde “repudia enérgicamente la agresión sufrida hoy por la fiscal Ángela Capitanio, integrante de la Sección de Violencia de Género, Familiar y Sexual de la Fiscalía Regional 5, con sede en la ciudad de Rafaela. La funcionaria del MPA fue insultada, amenazada y agredida físicamente en inmediaciones del edificio de Tribunales de la ciudad de Rafaela. La fiscal fue víctima de los ilícitos luego de finalizar un juicio oral y público en el que representó al MPA y en el que un hombre fue condenado a 10 años de prisión”.

Más tarde, el Colegio de Magistrados y de Funcionarios del Poder Judicial sacó otro comunicado, de similares características, marcando su “profunda preocupación y repudio, por una nueva agresión acaecida en el día de la fecha, hacia una Fiscal de esta Provincia, con motivo y en ocasión del cumplimiento de sus funciones. (...) Ya son reiterados los sucesos de este tipo que se vienen sucediendo en los Tribunales de la Provincia, por lo que este Colegio de Magistrados y Funcionarios se ve en la necesidad de reiterar el reclamo para que se adopten las medidas de seguridad que correspondan en los edificios tribunalicios, y que los/as magistrados/as y funcionarios/as puedan desempeñar sus funciones con la debida seguridad, libertad e independencia”.