Los perros expresan sus emociones de diversas maneras, por lo que es crucial comprender los signos y síntomas para ofrecerles el apoyo y el cuidado necesario. Según los expertos, los animales pueden enfrentar problemas de salud similares a la depresión ¿Cómo podemos reconocer si un perro está experimentando depresión?
Cómo detectar si un perro tiene depresión
Según los expertos de American Kennel Club, los síntomas de la depresión varían dependiendo de cada perro y de la gravedad del problema. Sin embargo, hay que tener en cuenta tres aspectos claves:
- Cambios en el lenguaje corporal durante sus interacciones con personas y con otras mascotas.
- Disminución del apetito.
- Comportamiento letárgico.
La Dra. Leslie Sinn, veterinaria y diplomada del Colegio Americano de Conductistas Veterinarios (ACVB), indica: “Lo principal sería un cambio en la conducta normal”, y añade: “Lo que escucho de la mayoría de mis clientes es que su perro no está dispuesto a realizar actividades que antes parecían disfrutar mucho”.
Asimismo, la doctora enumera otros signos de depresión:
- Comportamiento pegajoso y necesitado.
- Necesidad de estar más cerca del propietario.
Por otro lado, la doctora indica que es esencial que se realice un chequeo médico para descartar cualquier tipo de afección médica o dolor crónico, ya que los síntomas de la depresión suelen ser similares.
Cuáles son las causas comunes de la depresión en los perros
Los desencadenantes más comunes de la depresión en perros pueden incluir:
- Duelo durante el duelo por la pérdida de un compañero humano o animal.
- Dolor crónico.
- Trauma, incluidas lesiones, abuso o estrés a largo plazo.
- Cambios ambientales como mudanza de casa, realojamiento o la incorporación de un nuevo bebé o mascota al hogar. Incluso cosas como el regreso de los niños a la escuela después de unas vacaciones prolongadas o un cambio en su patrón de trabajo podrían ser factores.
- Aislamiento social.
- No recibir suficiente estimulación física y/o mental. Esto es especialmente cierto para las razas trabajadoras, motivadas y con mucha energía.
Cómo tratar a un perro con depresión
La doctora Sinn señala que a menudo, algunos simples cambios ambientales y sociales pueden marcar una gran diferencia: “Pasar más tiempo con ellos, llevarlos a paseos más divertidos, jugar a tirar un poco o tener una pequeña sesión de aseo“, comentó.
Por otro lado, para aquellos perros que su depresión sea un problema más grave, la doctora afirma que se va a necesitar apoyo adicional. La experta recomienda la orientación conductual de un profesional, y en algunos casos, recurrir al apoyo farmacológico con un veterinario.
