“El manto de Ulises” es en cierta forma es mi historia, reflexiona el artista, cuya obra está profundamente arraigada en su memoria y vivencias. Meza, incansable en su búsqueda creativa, trabaja en múltiples proyectos que exploran su identidad y el paso del tiempo, convirtiendo sus recuerdos en testigos eternos de su trayectoria.
“Siento que podría vivir en cualquier lugar del mundo, pero para mí es importante saber de dónde soy”, afirma el escultor sobre su obra, donde la identidad y la pertenencia se entrelazan con la materialidad de su creación.
La muestra se inaugura el martes 4 de febrero de 2025 a las 20:30 en GAP18, Alameda de la Federación 355, Paraná.
Desde la galería invitan a compartir este viaje artístico y reflexivo.
El Manto de Ulises
Marcelo Meza queda conmovido por un escrito que transcribimos hecho por su amiga italiana Tullia Piredda y que trasmite sus sentimientos frente a El Manto de Ulises.
Meza afirma que reprenta un resumen de su vida. Este es el texto de Piredda:
“Este mirto me penetra la piel, sabe al mirto de casa.
Esta luz me entibia, no obstante, sabe aún a rocío.
Esta tierra áspera y leve sabe a casa.
Nada es más reconfortante que esta tierra, ni siquiera mis astucias.
Nada es más dulce que este mar, ni siquiera Nausica.
Años lejanos, deslizados sobre las olas, robados en el haber olvidado, suspendido en un tiempo inflado de fluctuaciones y de aventuras.
¿Cómo podré encontrar el lazo de las horas?
Telémaco crecido… Penélope consumida.
¿Cómo podré mirar sus rostros y en el de ellos el mío?
Este sol me hiere como una daga y me envuelve como un manto tibio.
Es el sol que alumbraba en mis días de muchacho.
Sí, he llegado y aquí comienza un viaje aún.
Subiré este risco y buscare mi manto
Real… pesara sobre mis hombros cansados.
Adelante Ulises, que aquí comienza un viaje más todavía.
Camina hacia casa, camina”
Tullia Piredda
Milán, septiembre 2008.
