Silvina Pérez es el nombre que figura en sus documentos, pero responde por “Chila” entre sus amigos y en el mundo del deporte. Este último se ha convertido en un estilo de vida, que la llevó a tener la segunda mejor marca entre las mujeres que compitieron en la carrera por el Himalaya.
Se trata de una mendocina que no conoce los límites, motivo por el que acaba de dejar un registro en la historia. Y es que este gran logro lo obtuvo en la carrera de primer nivel mundial y máxima exigencia, como es la del Everest Trail Race.
Fueron horas, días, semanas, meses, años los que pasó entrenando en los cerros de Mendoza o en algún rincón del Parque General San Martín. Pero todo eso dio sus frutos; cada esfuerzo tejió este enorme reconocimiento.
La exigente carrera por el Himalaya: ¿De qué se trata?
Esta exigente competición tiene 170 kilómetros de recorrido. Según detallaron desde MDZ, cuenta con un desnivel acumulado, positivo y negativo, superior a los 26.000 metros, entre 2000 y los 4100 metros de altitud y se estructura en seis etapas de unos 25 km., 26 km., 30 km., 27.5 km., 32 km, y 30 km.
Se corre justamente por el Himalaya de Nepal, en la zona del Solukhumb. Cada participante debe llevar consigo toda la ropa que utilizará, y solo puede bañarse una vez al día con un cubo de agua caliente y una pastilla de jabón.
Lo que parece una película (tal vez de terror para algunos), es una realidad que se vive en el territorio asiático. Chila necesitó 34 horas, 43 minutos y 6 segundos para completar el recorrido, según calculó la mendocina.
Fue como estar corriendo sin parar durante un día y medio. En ese largo tiempo, puede que se le haya pasado por la cabeza abandonar, puede que no. La realidad es que no lo hizo, y muy por el contrario, terminó la carrera con rapidez.
