El Rengo Aguilera pidió quedar libre pero se lo negaron: irá a juicio

El exjefe de la barra de Godoy Cruz está acusado de liderar una banda que ingresaba marihuana a Mendoza proveniente de Paraguay.

Daniel 'Rengo' Aguilera, exjefe de la barrabrava de Godoy Cruz, será juzgado luego de que la Cámara Federal de Mendoza no hiciera lugar a los pedidos de nulidad que cuestionaron las escuchas telefónicas de la causa que le iniciaron en setiembre de 2017 por infracción a la Ley de Estupefacientes.

La defensa de Aguilera solicitó el sobreseimiento de su cliente, siempre concluyendo que se trataba de una persecución judicial por portación de apellido, como dijeron fuentes judiciales a diario El Sol.

Octavio de Casas, representante del Rengo, expresó ante las partes que "se ordenó la intervención telefónica de las líneas de terceras personas no imputadas ni vinculadas con elementos de convicción suficientes por el delito denunciado, por lo que se empezó a intervenir un sinnúmero de teléfonos hasta dar con las que se pretendía corroborar".

Básicamente, el letrado entendió que el único argumento que había "es el nombre y el apellido del imputado, Daniel el Rengo Aguilera", un hombre conocido en la provincia.

Desde la cárcel, el Rengo Aguilera daba las órdenes a la banda acusada de ingresar marihuana a la provincia desde Paraguay.
Desde la cárcel, el Rengo Aguilera daba las órdenes a la banda acusada de ingresar marihuana a la provincia desde Paraguay.

Juan Manuel González, en representación del Ministerio Público, por su parte, aseguró que los pedidos de intervención telefónicas estaban perfectamente fundados y explicó que, desde un principio, había motivos para "espiar" a Aguilera y a otros personajes del mundo del hampa.

Aguilera quedó complicado en la causa por drogas luego de que se realizaron allanamientos masivos en la penitenciaría de Boulogne Sur Mer, mientras él se encontraba detenido por una causa de maltrato contra su exmujer.

El Rango habría mantenido diálogos con diversos personajes que lo secundaban en la barra del Tomba. Por eso se solictió seguir con las escuchas telefónicas.

En los allanamientos que se desarrollaron, pos escuchas, Gendarmería Nacional secuestró un kilo de cocaína, marihuana, armas, dinero en dólares, euros y pesos (con un total de $470 mil), 36 celulares y 8 chips.

Aguilera es señalado como jefe de la organización porque hay sospechas de que daba las órdenes a sus conocidos mientras se encontraba en una celda de la cárcel.