“La emergencia sanitaria nos obliga a adaptarnos en el trabajo docente”

La ministra de Educación Isolda Calsina confirmó que el ciclo lectivo 2021 en Jujuy se desarrollará desde el miércoles 17 de febrero con un esquema de clases presenciales “obligatorias” y en los “horarios habituales”, con la particularidad de que en aquellas aulas a las que asistan más de 15 alumnos, se dividirá a los estudiantes en grupos que concurrirán día por medio.

“La emergencia sanitaria nos obliga a la necesidad de adaptarnos en el trabajo docente para hacer posible la vuelta a la escuela, con protocolos y una realidad nueva”, definió la Ministra, y tras subrayar que “lo esencial es volver con las clases presenciales”, explicó que “van a ser obligatorias y con los extremos cuidados y protocolos que hagan posible que las escuelas sean seguras”, como también apuntó que se implementará una “mixtura entre la modalidad presencial y la remota”, especialmente en el caso del nivel secundario y de asignaturas que requieran del traslado permanente de docentes.

“Enseñar y aprender en casa implicó ceñirnos en un vínculo pedagógico remoto; para eso se seleccionó saberes prioritarios y esto nos permitió evaluar el proceso completo del año 2020 y de esta manera organizamos los resultados que pudimos visualizar a fines del ciclo 2020”, sostuvo Calsina, haciendo un repaso de lo actuado el año pasado.

“En el 2020 -continuó- aprendimos a internalizar que la prioridad en emergencia es la salud y eso está ligado al bienestar, lo que implica la necesidad de la presencia en la escuela. Aprendimos que es irremplazable la escuela como tal. Unicef lo dice, también la Sociedad Argentina de Pediatría”, refirió la funcionaria, que al momento de hacer los anuncios estuvo acompañada por la secretaria de Gestión Educativa, Silvina Camusso, y la subsecretaria de Coordinación Educativa, Alejandra Mollón.

El regreso a las aulas

Acerca del dictado de clases, Calsina detalló que “será en el horario habitual” y “todos los días” para el caso de escuelas rurales y urbanas con baja matrícula de alumnos, mientras que en las instituciones con aulas con más de 15 alumnos “se van a desdoblar, con clases día hábil de por medio”.

De la mixtura con la modalidad de enseñanza remota, explicó que se dará sobre todo en el nivel secundario, donde “se trabajará con la virtualidad en muchas asignaturas en las que los docentes deben permanecer constantemente desplazándose de una escuela a otra”.

En cuanto a las medidas de bioseguridad que deberá aplicarse, las funcionarias indicaron que a tal fin “todas las escuelas están recibiendo elementos de limpieza” y los termómetros necesarios para los controles que deberá realizarse en el ingreso a los establecimientos, como también mencionaron la entrega de equipos con mochilas de sanitización para que en el caso de que aparezcan casos sospechosos se realice “inmediatamente” las tareas correspondientes de desinfección.

En tanto, el personal de servicio de cada escuela tendrá su “indumentaria de resguardo”, señalaron.

Acerca de los lapsos de recreo, mencionaron que el equipo directivo deberá programar “distintos tiempos y que los alumnos no salgan en el mismo horario”.

Respecto a la adaptación del trabajo docente, la ministra de Educación hizo especial referencia al decreto 1.807-E-2020 que rechazan los sindicatos del sector, ya que suspende la posibilidad de traslados, entre otros derechos contemplados en el Estatuto Docente.

“Es una medida de excepción que tiene que ver con la pandemia”, dijo la funcionaria al respecto y explicó que la idea es que los “docentes enseñen lo más cerca de sus casas”, lo que en la práctica será “cubrir con suplentes y reemplazantes que vivan en las zonas cercanas a los establecimientos”.

En perspectiva de la Ministra, esto redundará además en “trabajo para muchos docentes desocupados actualmente”, además de hacer notar que se pagará “la zona desfavorable tanto al docente titular del cargo, como al que haga el reemplazo”, resumió Calsina.