La Multisectorial de Mujeres y Disidencias de Jujuy convocó para este jueves a las 17:00 una movilización con el propósito de acompañar el reclamo de familiares y amigos por el esclarecimiento de la muerte de Gabriela Cruz, la joven cuyo cadáver fue hallado en horas de la madrugada en una zona de montes, en la periferia de la ciudad de Palpalá.
La marcha tendrá como punto de encuentro el monumento a San Cayetano, próximo a la Ruta Nacional 66, y también demandará justicia para Cesia Reynaga, Iara Rueda y Roxana Mazala, las más recientes víctimas de femicidio en la provincia en los últimos treinta días.
El miércoles una multitudinaria marcha hizo el mismo reclamo en la capital provincial, exigiendo además las renuncias del ministro de Seguridad, Ekel Meyer, y de la titular del Consejo de la Mujer de Jujuy, Alejandra Martínez.
La protesta generalizada siguió a los femicidios de Roxana Mazala, de 31 años, quien fue envenenada el martes en la ciudad de Perico por su pareja, que se suicidó; de Iara Rueda, de 16, quien fue hallada sin vida y semienterrada en un descampado de la ciudad de Palpalá el último lunes; y de Cesia Nicole Reynaga en Abra Pampa, el pasado 8 de septiembre, tras permanecer diez días desaparecida.
La columna recorrió calles céntricas manifestando a viva voz la consigna "Ni una menos, vivas nos queremos" y el pedido de renuncia de funcionarios del Gobierno provincial.
"No les importa nuestras vidas, renuncien", rezaban carteles de las manifestantes en alusión al gobernador Gerardo Morales, el ministro de Seguridad, Meyer; y la titular del Consejo de la Mujer, Martínez.
"Somos el grito de las que ya no están"; "A las mujeres no se la traga la tierra, las secuestran con la complicidad del Gobierno que no las busca"; "Queremos justicia"; "Si algún día no vuelvo, quemen todo", fueron otros de los mensajes que empuñaban las mujeres.
A la caminata se sumó una caravana de motocicletas que hicieron sonar un persistente "bocinazo" acompañando las expresiones de repudio a la ola de muertes, en medio de una convulsión social instalada en la provincia desde el femicidio de Cesia Reynaga.
"El Estado está ausente, no busca a las niñas y mujeres desaparecidas porque no les interesa y solamente hace propaganda de medidas abstractas contra la violencia de género", sostuvo Natalia Aramayo, integrante de la Multisectorial de Mujeres de Jujuy, mientras se enfilaba a la multitud.
La activista sostuvo que la "gente no quiere más estos hechos", al valorar las masivas manifestaciones en la ciudad Palpalá y otros puntos de la provincia "para decir que estamos juntas y esto se tiene que acabar". "Gritamos fuertes, libres y sin miedo nos queremos", enfatizó.
En ese marco las activistas criticaron fuertemente la decisión del gobernador Morales de crear un "Comité de actuación ante desapariciones y extravíos de mujeres", al cual consideraron "una burla" porque "las acciones concretas no están", al señalar falencias en la búsqueda por parte de la policía de las adolescentes asesinadas.
"La única manera que esto cambie es que declare la emergencia por violencia de género en la provincia", sostuvo Aramayo, para insistir en la renuncia del ministro Meyer y de Martínez. "Se tienen que ir y dejar de mentirnos", sentenció.
En la marcha, bajo un clima de dolor e ira, estuvieron organizaciones sociales, estudiantiles, barriales y políticas que se unieron en pedido de justicia de respuestas por parte del Estado jujeño.
Las protestas se replicaron en San Pedro, Palpalá y Lozano, mientras que en la ciudad de Córdoba y en la Casa de Jujuy en Buenos Aires también grupos de mujeres adhirieron a los reclamos.