En un polémico debut en los Juegos Olímpicos, la Selección Argentina Sub 23 cayó 2 a 1 ante Marruecos después de que un gol de último minuto fuera anulado por el VAR. La situación desató la furia del entrenador Javier Mascherano, quien calificó el episodio como “el circo más grande que vi en mi vida”.
El desenlace del partido estuvo marcado por la confusión y la controversia. Al finalizar el tiempo reglamentario, el árbitro agregó 15 minutos, y en el último de esos minutos, Medina logró el empate para Argentina.
Por qué se suspendió el partido
Sin embargo, una invasión de campo por parte de los hinchas marroquíes y el uso de bombas de estruendo provocaron la suspensión momentánea del partido, que se alargó casi una hora y media.
Luego de que los jugadores salieran de los vestuarios a la cancha nuevamente, el VAR revisó la jugada y anuló el gol de Medina por posición adelantada. Tras esta decisión, ambos equipos fueron llamados para disputar los tres minutos restantes. Sin tiempo para recuperarse del golpe emocional, Argentina no pudo cambiar el resultado y perdió 2 a 1.
La reacción de Mascherano al finalizar el partido
El episodio culminó con una tensa situación en el campo, donde los agentes de seguridad se vieron desbordados por la multitud que ingresó al terreno de juego, obligando a los jugadores argentinos a buscar refugio en los vestuarios bajo la dirección de Mascherano.
“Ayer nos entraron a robar el predio. A Almada le robaron las cosas. Nos piden credencial para todo, pero después pasan estas cosas. Hoy invadieron siete veces el campo y después nos tiraron petardos. Nos dijeron que estaba terminado 2 a 2. Nosotros ni Marruecos quería jugarlo”, expresó Mascherano tras el partido.
