Es el segundo torneo en relevancia de Europa, y se juega mucho en cada partido, y más en una semifinal. Juventus y Sevilla se vieron las caras, para definir quién sería el rival de la Roma en la gran final, y el choque tuvo de todo, hasta incluso, una reacción insólita sobre el cierre del encuentro.
Sevilla supo imponerse al la “Vecchia Signora”, con un golazo en el minuto 95 (se jugó alargue) del argentino Erik Lamela, haciendo que el marcador terminase 2 a 1 para los de España. En la ida, en Turín, habían igualado 1 a 1. Por eso mismo, el Sevilla volverá a jugar una final de la UEFA Europa League, un torneo en el que es el claro dominador, con 6 copas, y el que más ostenta este trofeo.
Pero además de lo emocionante del partido, sobre el final del mismo, se vivió un momento tenso e insólito entre dos campeones del mundo de la Scaloneta: Leandro Paredes y Marcos Acuña.
Paredes defiende los colores de Juventus, y Acuña los de Sevilla. Faltando casi nada para el final, y ya con el marcador favorable, el “Huevo” fue a hacer un lateral en la mitad de la cancha y demoró más de la cuenta en realizarlo.
Por este accionar, Paredes le protestó airadamente al árbitro del encuentro, que se percató de lo sucedido y decidió amonestar a Acuña. El detalle es que el lateral izquierdo ya estaba amonestado, por lo tanto, resultó expulsado y se perderá la final del torneo.
Llamó poderosamente la atención la actitud tan efusiva de protesta de Paredes, teniendo en cuenta que estaba perjudicando a un rival, pero que ese rival era su compatriota, con quien supo levantar la Copa del Mundo en Qatar. Claro está, a la hora de defender los colores de su equipo, el exjugador de Boca parece tener bien puesta la camiseta.
