Una niña de 9 años fue atacada por una jauría de perros el domingo 7 de mayo y a raíz de las graves heridas tuvieron que amputarle uno de sus brazos en el Hospital de Niños, donde permanece internada. Este miércoles, compartieron el alentador parte médico de la paciente.
Desde principios de mes, la menor estuvo alojada en terapia intensiva y en las últimas horas los profesionales decidieron pasarla a una sala intermedia. Es que, comenzó a presentar mejoras, según expresaron desde el nosocomio.
La pequeña ingresó en la tarde-noche del 7 de mayo, con una amputación de brazo izquierdo, una fractura de omóplato derecho, lesiones en el cuero cabelludo y vascular en el cuello del lado derecho, contusiones pulmonares y desinversión de pabellones auriculares.
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Luego de permanecer 10 días en estado crítico y con pronóstico reservado, empezó a presentar importantes evoluciones y por eso la cambiaron de sala dentro del nosocomio capitalino. Cabe recordar que, los animales de familia que agredieron a la mejor fueron sacrificados.
