Lago San Roque: informe de la UNC y la Conae acredita que la COOPI arroja líquidos sin tratamiento al embalse

El lago San Roque de Villa Carlos Paz viene sufriendo un elevado grado de contaminación desde hace más de 5 décadas; sin embargo, desde que el Municipio no le renovó el contrato a la Cooperativa Integral para el servicio de cloacas, la prestataria se apropió del servicio y lo judicializó. Hoy, tal como sucedió con el servicio de agua, la Justicia deberá resolver la devolución del servicio a los vecinos.

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En este marco, desde el 2017 el Municipio denuncia penalmente a la Cooperativa por el volcamiento de líquidos cloacales al lago, sin tratamiento alguno. En su oportunidad, el intendente de mandato cumplido Esteban Avilés llevó a cabo la primera denuncia a la Coopi, por verter al lago líquidos sin tratarse adecuadamente. Es decir, contaminados.

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Posteriormente, el actual intendente Daniel Gómez Gesteira amplió esa denuncia penal por detectarse nuevamente un nivel de contaminación importante en el sector. En tanto, recientemente, llevó adelante ya la tercera denuncia en contra de la Cooperativa Integral, que con total irregularidad acciona en contra del espejo de agua, arrojando nuevamente líquidos cloacales sin los químicos ni el tratamiento adecuado y provocando un nivel de contaminación que se acrecienta con los años.

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Un estudio del Instituto Gulich (UNC/Conae) analizó los patrones de distribución de la clorofila en el embalse entre 2016 y 2019, periodo de tiempo que coincide con las primeras denuncias que ya había realizado el Municipio en su momento.

Cabe destacar que el florecimiento de las algas, está asociado a una mayor presencia de nutrientes, entre los que se destacan principalmente las aguas cloacales sin tratamiento adecuado.

La investigación, publicada por Argentina Investiga, aportó datos concretos sobre la contaminación efectuada por la Cooperativa Integral al lago San Roque. “El punto de descarga de la planta de tratamiento de aguas servidas de la ciudad de Carlos Paz coincide con un foco de afloramiento de algas, principalmente durante la primavera y el verano”, señalan con claridad.

Y agregan: “Se trata de un indicio concreto de que el agua vertida tras el tratamiento de los efluentes todavía conserva una elevada carga de nutrientes, que no pudo ser retenida completamente durante su procesamiento”.

Río Cosquín, cada vez más agravado

Además, el informe destaca el grado de contaminación del Río Cosquín y afirma que “empeoró con el transcurso del tiempo”. Ese resultado tiene un agravante. “Por la dinámica hídrica de ese reservorio, el grueso de los nutrientes que inyecta ese tributario termina acumulándose en la zona de la garganta del dique”, indican los científicos que elaboraron el informe.

Al respecto, Alba Germán (autora principal de la investigación) señaló a Argentina Investiga que si bien históricamente el río San Antonio ha sido considerado como “el principal responsable” de la contaminación del embalse, los resultados ahora apuntan al río Cosquín como el más perjudicial.