29° Raid Náutico Internacional de Tierra del Fuego

El calafateño Hugo Gonzalez kayakista participó por tercera vez de esta travesía.

Se llevó a cabo en Río Grande el evento más importante que tiene el Canotaje fueguino, la 29° Edición del Raid Náutico Internacional de Tierra del Fuego, el evento que organiza el Club Náutico Ioshlelk Oten.

El kayakista calafateño Hugo González, viajo hasta el fin del mundo para formar parte de esta travesía donde se anotaron 28 deportistas y finalmente 25 pudieron completarla.

El raid para los participantes comenzó el sábado con el traslado de ellos y sus embarcaciones al sector de estancia Onamonte. Tras hacer noche en la estancia Onamonte, donde se armó el primero de los dos campamentos, zarparon el domingo cerca de las 9 de la mañana en busca del primer tramo, el cual culminó después de las 17:00 en Puerto de Palos.

Las condiciones del primer día de navegación fueron excelentes; a lo largo de todo el trayecto por aguas chilenas el clima acompañó a los participantes con sol, y viento moderado lo que ayudó a los remeros a llegar de la mejor manera al primer descanso.

Una vez en Puerto de Palos los anfitriones fueron el “Negro” Ponce ayudado por Emilio Saldaño y Ariel, el hijo del querido Negro.

El Lunes los remeros zarparon alrededor de las 8:30. Los primeros pasajes de la travesía fueron complicados por el frío de la mañana y por el viento que derivaron en algunas vueltas de campaña en los participantes pero que no imposibilitaron que fueran rescatados y que retornasen a la travesía sin ningún tipo de inconvenientes.

La segunda etapa es la más extensa de todas y, por el relieve que acompaña al río en esta parte argentina, el viento se hace notar un poco más. Varios de los participantes se fueron quedando sin las fuerzas necesarias para remar a un ritmo sostenido, que si bien no se les exige, es importante para que los gomones de seguridad los puedan socorrer.En este caso, uno era manejado por "Semilla" Gerez, y el segundo por personal de Prefectura Naval Río Grande.

Este retrazo de algunos participantes obligó a parar en distintas oportunidades y los propios organizadores desde el río avisaron a los responsables de la seguridad en tierra que el Raid no iba a culminar en la sede social del Club Náutico Ioshlelk Oten como estaba previsto y que iba a ser innovador. La XXIX edición del Raid culminó en la toma de agua que posee la Municipalidad a la vera del río Grande. Allí medio centenar de familiares y amigos aguardaron la llegada de todos los remeros.