En el predio de Ciudad Universitaria en Buenos Aires hay un humedal de 23 hectáreas con una enorme diversidad de flora y fauna.
Desde el año 2012 se encuentra protegida por la Ley 4467 que prohíbe “alterar la Reserva Ecológica Costanera Norte” ya sea impermeabilizando su superficie, excavándola, rellenándola, desmontando o realizando “cualquier otra obra o acción humana” que degrade la biodiversidad de Ia zona.
Este espacio forma parte de un corredor verde conformado por varias reservas urbanas costeras y alberga a más de 600 especies animales y otras 300 más entre vegetales y hongos.
Recientemente, el Gobierno de la Ciudad y la Universidad de Buenos Aires anunciaron la construcción de dos locales gastronómicos sobre esta zona y la comunidad denuncia que tendrá un impacto ambiental negativo generando el desplazamiento de especies, contaminación lumínica nocturna, sonora afectando aves, reptiles y peces y la futura contaminación generada por las implicancias del funcionamiento y uso que tendrán los locales, qué terminará indefectiblemente afectando al río.
La construcción sobre humedales genera que haya menos sombra, aumentando la temperatura en medio de una crisis climática donde en Argentina vemos un aumento en las olas de calor. A nivel internacional es totalmente desaconsejado reducir los espacios verdes, principales aliados para mitigar el CO2.
Nahuel Conte, es estudiante de la carrera de Licenciatura en Ciencias Biológicas en la UBA y cuenta a Vía País que “no es una necesidad de los estudiantes” la construcción de un polo gastronómico al lado de su Facultad.
“Quienes estamos en la carrera de biología nos vemos perjudicados porque en la Reserva se hacen salidas de campo no invasivas que son esenciales para la docencia y el aprendizaje de las materias iniciales de la carrera. Tener locales en el área altera el normal funcionamiento del ecosistema y consecuentemente la información que se pueda obtener de allí”, afirmó.
Los estudiantes denuncian que esta nos es la primera vez que la Reserva se ve alterada. “Hace poco hubo un recital de Hernán Cattaneo, realizado sobre el campo de deportes de Ciudad Universitaria, realizado sin consultas de la UBA con los expertos de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y otras organizaciones que regulan el funcionamiento de este espacio”, contó Nahuel. Este show alteró con sus sonidos (a volúmenes altísimos) la vida de la fauna de la zona y denuncian que esto tampoco era una “necesidad” de la comunidad.
Nahuel cuenta que se enteraron vía mail de la construcción del polo gastronómico y que rápidamente estallaron los grupos de WhatsApp. “En pocos días nos autoconvocamos algunos alumnos y profesores y se formalizó una Asamblea, con comisiones dedicadas a diversas tareas como la difusión de actividades y de información acerca de la Reserva”, explicó.
En la Asamblea abierta participan no solo integrantes de la comunidad educativa de la UBA sino también de vecinos de la zona, organizaciones ambientales, sectores conservacionistas. “Todo aquel que le interese el tema ambiental”, dice Nahuel y agrega que ahí todas las propuestas son bienvenidas y se someten a votación de quienes estén presentes en la reunión asamblearia.
En un comunicado de prensa que difundió la Asamblea Abierta en defensa de la Reserva exigen al Gobierno Nacional “la sanción de la Ley de Humedales consensuada por los territorios que aun al día de hoy permanece cajoneada en el Congreso”.
Al ser consultado sobre este punto, Nahuel dijo a Vía País que “los humedales son ecosistemas muy frágiles pero también extremadamente ricos en biodiversidad” y hay que defenderlos.
“La falta de una regulación a nivel nacional para con estos ecosistemas es una de las causas de estos atropellos que se hacen, en este caso, sobre la Reserva de Ciudad Universitaria, pero también con los humedales de la cuenca del Paraná- del Plata: incendios, implantación de ganadería intensiva, urbanizaciones, entre otros”.
El cronograma de actividades y manifestaciones de la Asamblea Abierta es álgido, urgente y lo difunden desde su cuenta de Instagram, acá.
Colgarán carteles sobre el puente del humedal para visibilizar el reclamo y que todos los estudiantes y docentes se enteren. Harán vivos de Instagram con investigadores y científicos. Convocan para el domingo 4 de junio a clases de origami y plantación de árboles nativos en la Reserva para habitar el espacio y el viernes 9 harán una nueva reunión de la Asamblea convocando a integrantes de otras Facultades.
