Misterio en Alemania: profanaron la tumba de Reinhardt Heydrich, el jerarca nazi conocido como "el carnicero"

Fue en el Cementerio de los Inválidos de Berlín, el hecho fue descubierto el pasado jueves. Los responsables no lograron sacar ninguna parte del esqueleto de Heydrich.

La tumba anónima del exjefe de las SS, Reinhard Heydrich, fue profanada en un cementerio de Berlín, en Alemania. Según informó la policía local, un grupo de desconocidos intentó robar los restos mortales de este jerarca nazi pero no lo logró.

Heydrich murió en Praga en 1942 como consecuencia de un atentado y, tres años después, tras el fin de la II Guerra Mundial, su lápida y su nombre de la tumba fueron retirados, al igual que se hicieron en otros sitios donde están sepultados jerarcas nazis, para evitar que se convirtiera en lugar de peregrinación neonazi.

Profanaron la tumba de Reinhardt Heydrich, el jerarca nazi conocido como "el carnicero" (Foto: Odd ANDERSEN / AFP)
Profanaron la tumba de Reinhardt Heydrich, el jerarca nazi conocido como "el carnicero" (Foto: Odd ANDERSEN / AFP)

El informe policial constató que el hecho fue descubierto el pasado 12 de diciembre por trabajadores del cementerio. Según declararon, encontraton un agujero justo en el lugar donde están los restos de Heydrich.

"La tumba fue abierta en la noche del miércoles al jueves", indicó a la AFP un portavoz policial.

Heydrich era un alto oficial de las SS que presidió la conferencia de Wannsee en Berlín, donde se planificó la logística del Holocausto. Allí el líder nazi buscaba "recursos y métodos para una solución final de la cuestión judía", según explicó EFE.

La tumba de Reinhardt Heydrich, en el Cementerio de los Inválidos de Berlín (Foto: Odd ANDERSEN / AFP)
La tumba de Reinhardt Heydrich, en el Cementerio de los Inválidos de Berlín (Foto: Odd ANDERSEN / AFP)

Más allá de la profanación, la policía confirmó que no se pudo concretar el robo ya que el esqueleto de Heydrich estaba completo. 

Adolf Hitler describió a Reinhardt Heydrich como "el hombre con el corazón de hierro" (Foto: Odd ANDERSEN / AFP)
Adolf Hitler describió a Reinhardt Heydrich como "el hombre con el corazón de hierro" (Foto: Odd ANDERSEN / AFP)

No es la primera vez que sucede un hecho de este estilo. Según recordó el diario berlinés Der Tagesspiegel, una acción similar que tuvo lugar en febrero de 2000 cuando un grupo de extrema izquierda abrió la tumba del oficial de las SS Horst Wessel.

En aquel momento, se supo que los autores fueron los Autonomen Totengräber (Excavadores de tumbas autónomos), que aseguraron haber arrojado el cráneo de Wessel al río Spree. Pero la policía lo desmintió.

El Cementerio de los Inválidos (conocido en Alemania como Invalidenfriedhof) en uno de los más antiguos de Berlín y allí están enterrados muchos militares del siglo XIX y de comienzos del siglo XX. Entre ellos, dos nazis de alto rango: Heydrich y el ministro de Armamento Fritz Todt, que también murió en 1942 pero en un accidente aéreo.

¿Quién fue Reinhardt Heydrich?

Fue un oficial nazi de alto rango durante la Segunda Guerra Mundial y uno de los principales artífices del Holocausto.

En el apogeo de su carrera ostentó el rango de SS-Obergruppenführer und General der Polizei y fue jefe de la Oficina Central de Seguridad del Reich (RSHA), el organismo que agrupaba a la Gestapo, a la KriPo, y al SD.

También fue Stellvertretender Reichsprotektor del Protectorado de Bohemia y Moravia, la actual República Checa. Heydrich también fue presidente de la Organización Internacional de Policía Criminal (luego conocida como Interpol) y jefe de la Gestapo en el período anterior a la Segunda Guerra Mundial.

Heydrich estuvo a cargo de la organización de la represión nazi en Europa. Los historiadores lo definen como una de las figuras más oscuras de la élite nazi.

Hasta Adolf Hitler lo consideraba un desalmado al definirlo como "el hombre con el corazón de hierro".​

A lo largo de su carrera fue conocido por distintos apodos: El Verdugo,​ el Carnicero de Praga​ y la Bestia Rubia.

A finales de 1941, tras su llegada a Praga como Reichsprotektor, Heydrich trató de eliminar la oposición a la ocupación nazi mediante la supresión de la cultura checa, así como la deportación y ejecución de miembros de la resistencia checa.

El 27 de mayo de 1942, fue atacado y herido gravemente en Praga por un comando checoslovaco que formaba parte de la operación Antropoide que había recibido entrenamiento especial de los británicos y que había sido enviado a Praga por el Gobierno checoslovaco en el exilio para asesinar al Reichsprotektor. Heydrich murió como consecuencia de una septicemia provocada por sus heridas una semana más tarde.

Sus restos fueron repatriados a Berlín y el líder nazi recibió a título póstumo la mayor condecoración del III Reich, antes de ser enterrado en este cementerio berlinés.