Presentaron un colectivo reconvertido en Rosario y se quedó al día siguiente

El trolebús es el cuarto ómnibus modificado para la línea K, pero la puesta en servicio no comenzó bien.

La unidad comenzó a circular este miércoles desde Mendoza y bulevar Avellaneda.
La unidad comenzó a circular este miércoles desde Mendoza y bulevar Avellaneda. Foto: Silvio Moriconi

La Municipalidad de Rosario anunció este miércoles la puesta en marcha de un colectivo reconvertido para utilizar energía eléctrica. La buena noticia en materia ambiental y de servicios públicos dio un giro inesperado en apenas 24 horas, ya que el trolebús quedó fuera de servicio en la zona oeste.

El ómnibus presentado por el intendente Pablo Javkin es el cuarto vehículo hecho con un chasis en desuso como parte de la renovación del Transporte Urbano de Pasajeros (TUP). El lanzamiento en barrio Echesortu tuvo mucha repercusión, pero después surgieron algunas complicaciones.

¿Qué pasó con el coche 36 de los colectivos reconvertidos en Rosario?

El nuevo colectivo quedó parado sobre San Juan y Gutenberg a mitad de la mañana. De esta manera, el servicio de la línea K sufrió una pequeña demora y algunas personas advirtieron que se trataba de la misma unidad inaugurada el día anterior a pocas cuadras.

La grúa fue a la zona oeste antes del mediodía.
La grúa fue a la zona oeste antes del mediodía. Foto: Redacción Vía Rosario

A partir de una falla, el coche 36 terminó remolcado con un vehículo de asistencia mecánica de la empresa Movi. Al margen de este incidente no se reportaron otros problemas con el funcionamiento del transporte público de Rosario.

Fuera de este caso particular, la Municipalidad decidió utilizar este tipo de ómnibus para actualizar la línea K. El proyecto contempla sumar otros seis colectivos reconvertidos este año y completar el proceso de renovación en 2025.

La K tiene una de sus principales paradas en Avellaneda y Mendoza.
La K tiene una de sus principales paradas en Avellaneda y Mendoza. Foto: Silvio Moriconi

El plan se desarrolla a partir de un acuerdo con la empresa Inventu y la Universidad Nacional de Rosario (UNR). Dado que la situación económica actual impide comprar trolebuses nuevos, el Ejecutivo apuesta a sostener esta iniciativa con coches viejos.

El sistema de reconversión requiere vehículos de más de diez años de antigüedad. Para sumarse a la red de la línea K, en cada caso se incorpora un motor eléctrico con sistema de control para dejar de lado el uso de gasoil.