Con una infancia muy marcada por sus constantes pasos por el quirófano, un neuquino de 32 años dedica sus días a acompañar a niños que están internados en el Hospital Castro Rendón vestido del famoso personaje de El Mandalorian.
La reconocida serie de Star Wars, transmitida por Disney+, trata de un habilidoso cazarrecompensas intergaláctico -llamado Din Djarin- que se compromete a cuidar a un pequeño alienígena llamado Grogu. Su popularidad llegó a tal punto que un vecino de Neuquén capital hizo su propio disfraz.
Erik Pincheira es quien está debajo de ese casco mandaloriano, y también quien entiende lo que están viviendo los pacientes del sector de Pediatría. Muy parecido a como le ocurrió al héroe de la saga, su corazón se estrujó al ver a los niños que estaban internados y decidió poner manos a la obra.
El Mandalorian visitó el Hospital Castro Rendón durante el Día del niño
“Fue una cosa de otro mundo, una mezcla de sentimientos y emociones. Me sentí muy bien al ver a los chicos sorprendidos, contentos. Fue como verme a mi también, porque yo lo viví, sé lo que es, estuve en al situación de ellos”, indicó a LMNeuquén.
En este sentido, añadió: “Sentí que estábamos muy conectados. Volví a ser niño de vuelta, y lo más importante es que lo pasamos lindo, compartimos, nos reímos. Ellos se merecían un día especial”. Durante el Día de las Infancias, desarrollado el domingo 20 de agosto, se puso en los zapatos del Mandalorian y visitó a los pequeños pacientes.
Justo una semana después volvió a colocarse el traje, pero paseó por el Círculo Policial. Había sido convocado por una compañera de trabajo a un evento que se efectuó allí, y colaboró en una entrega de regalos.
Ahora bien, la idea original fue ir al nosocomio debido a que entiende por lo que pasan los niños allí. Erik posee una hipoacusia profunda con malformación congénita, cuyos tratamientos lo llevaron desde niño a estar internado y someterse a distintas cirugías. Si bien usa el habla, también se comunica muy bien a través de la lengua de señas.
“Está haciendo todo a pulmón, en forma totalmente particular. Es una meta que se propuso desde hace muchos años y está a punto de lograrlo. Creo que la sociedad neuquina, merece saber que siempre hay alguien haciendo el bien. Puede ser la inspiración de niños y jóvenes, a no rendirse ante adversidades”, manifestó su madre Mercedes.