Los vecinos de la mujer que se encuentra detenida por matar a golpes a su hijo de dos años y nueve meses relataron cómo vivían en la casa de Luján de Cuyo. Explicaron que al pequeño lo solían ver con lesiones en la cara.
El hecho se inició cuando Yamila Micaela Ibáñez (24) llegó con su bebé al Hospital Notti de Guaymallén. Fue atendida por los médicos porque el pequeño Juliano Gastón Ibáñez había sufrido un paro cardíaco. Los doctores de la guardia intentaron reanimarlo pero ya era tarde, el nene había fallecido.
Hasta ese momento parecía una muerte normal pero luego de un adelanto de los estudios médicos confirmaron que la criatura tenía una fractura en la columna y hematomas en la cabeza.
La progenitora quedó detenida y a disposición del fiscal de Homicidios Horacio Cadile, quien es subrogado por su par, Carlos Torres. En las próximas horas será imputada por homicidio agravado por el vínculo.
Otra vecina explicó que en esa casa vivía la joven madre con otro pequeño de seis años, su pareja, la suegra -trabaja como celadora en un colegio de Perdriel- y sus cuñados. Residían más de cinco personas o hasta diez, detallaron.
"La vi entre tres y cuatro veces en los últimos dos meses y nunca pensé que le podían hacer eso. La saludé un par de veces y solía venir a mi casa a tomar mates", relató otra mujer que vive en una casa lindante.
Si bien estas personas indicaron que no se escuchaban peleas frecuentes en esa casa, otra mujer indicó que el nene "siempre tenía moretones". La testigo, quien prefirió resguardar su identidad, explicó que en algunas ocasiones cuando veía a la madre y a la criatura, Juliano tenía algunas marcas de golpes en la carita.
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