Volverán a juzgar a un pedófilo por otros casos de abusos en un hogar de niños en Montecarlo

Omar Raúl Mudry, quien ya fue condenado a 30 años de cárcel en 2011 por abusos a menores, enfrentará un nuevo juicio por casos adicionales del mismo tipo. Las audiencias están programadas para los días 4, 5 y 6 de diciembre.

Volverán a juzgar a un pedófilo por otros casos de abusos en un hogar de niños en Montecarlo.
Volverán a juzgar a un pedófilo por otros casos de abusos en un hogar de niños en Montecarlo. Foto: Misiones Online

El Tribunal Penal Uno de Eldorado ha anunciado que Omar Raúl Mudry, quien previamente fue condenado a 30 años de cárcel en 2011 por abusos en el hogar infantil “Tabita”, enfrentará un nuevo juicio por casos adicionales de abuso sexual.

Las audiencias, programadas para los días 4, 5 y 6 de diciembre y presididas por el magistrado Ángel Atilio León, acusan a Mudry de “promoción a la corrupción de menores agravado”, utilizando métodos como violencia, amenazas y abuso de autoridad en su rol como encargado de educación y guarda.

En esta ocasión, las acusaciones se centran en abusos contra dos hermanos, una niña y un niño de 6 y 4 años, obligados a participar en actos sexuales entre ellos y presenciar abusos a otro adolescente residente del hogar. Además, Mudry enfrenta cargas por golpear a los niños con zapatos y otros objetos cuando se resistían a cumplir sus demandas.

El primer juicio contra Mudry surgió tres años después de la denuncia inicial en 2008, cuando una trabajadora social reveló los horrores vividos por los menores en el hogar “Tabita”. Durante ese proceso, Mudry fue condenado por violar a cuatro chicas, manosear a otras tres y promover la corrupción de dos menores. En ese momento, el fiscal Federico Rodríguez calificó los crímenes como “el delito más tremendo en el que me tocó intervenir en toda mi carrera” y solicitó 40 años de cárcel para Mudry.

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A pesar de las pruebas presentadas, el acusado y sus abogados intentaron desacreditar las denuncias alegando motivaciones políticas y envidia hacia su posición en el hogar. El horror de los abusos salió a la luz cuando una trabajadora social recibió el testimonio de una niña de trece años, revelando los abusos sufridos y cómo Mudry mantenía el silencio a través de castigos físicos, amenazas y privación de alimentos.