Pequeños científicos cordobeses: adolescentes lograron crear un satélite que será lanzado desde la Conae

Cansat Argentina consiste en una iniciativa organizada por el Ministerio de Ciencia, tecnología e Innovación y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae). Propone a estudiantes de escuelas secundarias construir un pequeño satélite para aprender el proceso de creación de una misión satelital.

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En esta segunda edición, fueron cinco los proyectos ganadores de Cansat para lanzar sus satélites. Uno de ellos pertenece a un grupo de alumnos del Colegio Nacional de Monserrat. El equipo, llamado “Novationes”, está integrado por Giuliana Lodolo, Josefina Quinteros Sarmiento, Ivo Tobías Maller, Agustín Godoy Giménez y María Agustina Bastos Villacé.

Los alumnos del Monse crearon un satélite que será lanzado desde la Conae

Los estudiantes lanzarán su satélite desde el Centro Espacial Teófilo Tabanera de la Conae, en Falda de Cañete, en el interior cordobés. El suceso será el 28 de septiembre por la mañana, a bordo de cohetes que alcanzarán una altura de 400 metros. Al regreso, podrán descargar y procesar la información generada por sus “misiones espaciales”.

“En abril los estudiantes comenzaron a transitar este camino junto a muchos profesores del colegio, que actuaron como consultores desde sus diferentes áreas”, relató Matías Leuci, profesor coordinador del proyecto, en diálogo con Radio Universidad.

Con respecto a la competencia, dijo: “Cansat tiene relación con la Nasa y con la Agencia Espacial Europea, de allí se toma esta idea para estimular el estudio de la ciencia por parte de los jóvenes”.

Cómo fue la competencia que ganaron los chicos del Monse

El concurso cuenta con una serie de requerimientos, entre ellos se encuentran respetar las dimensiones específicas que debe tener el aparato a construir. “Tenía que ser compatible con el lanzador que lo impulsará a 400 metros de altura en pocos segundos”, explicó Leuci.

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“El equipo debía proponerse una misión. Novationes tomó como objetivo medir las partículas suspendidas en el centro de la ciudad, donde está el colegio”, agregó. Sobre el trabajo en conjunto con los estudiantes, sostuvo: “Recabamos información sobre física, electrónica, programación y otras temáticas”.

Leuci señaló que el camino recorrido por los alumnos fue “muy largo”, ya que llegaron a quedarse hasta 12 horas en el colegio. “Esto es el resultado de una ayuda colectiva entre familias, docentes, la cooperadora y la asociación de egresados”, afirmó. En este sentido, cerró: “La pasión de los estudiante contagiaba al resto”.