Bernardo García Hamilton comparó a José Alperovich con el perro "Familiar"

Se trata de un personaje de una leyenda de terror de los Pueblos Azucareros del Norte Argentino. 

Bernardo García Hamilton
Bernardo García Hamilton

El Secretario de Estado de Relaciones Institucionales de Tucumán apuntó contra el ex gobernador y actual senador tucumano, José Alperovich. Lo comparó con un perro que hacía desaparecer a obreros indisciplinados, según cuenta una leyenda urbana.

Bernardo García Hamilton fue invitado al programa televisivo "Los Primeros" y fue en el aire de Canal 10 que hizo la analogía entre el perro "El familiar" con Alperovich, aclarando que esa era su opinión personal. Y señaló: "Mientras yo militaba él paso de comunista a radical y entró por la ventana al peronismo, alquiló la franquicia".

Además sostuvo que "está clarísimo que las encuestas le dan muy mal, con las fotitos en las redes sociales no gana una elección" y pidió que siga en su banca como Senador hasta 2021 para que "deje descansar al espacio de sus acosos".

En relación a los "ataques" que recibió por parte de Sergio Mansilla, García Hamilton lo comparó con un "caschi toreador" enviado por "el perro Familiar", es decir, el ex Gobernador de Tucumán, para atacarlo.

"El perro Familiar" al que hace referencia el Secretario de Estado de Relaciones Institucionales, se trata del personaje de una leyenda de terror de los Pueblos Azucareros del Norte Argentino. En la misma se habla sobre un pacto entre los dueños de los ingenios y el Diablo, en el cual se comprometían a entregar un peón anualmente a cambio de prosperidad y riqueza.

Pero además "El Familiar", hacía "desaparecer" a los trabajadores indisciplinados. Y es en este punto al que hace referencia el funcionario tucumano, que replicó sus dichos en su cuenta de Twitter pero luego eliminó la publicación.

El perro
El perro

El post comenzaba diciendo "EL PERRO FAMILIAR DEL SIGLO XXI"​ y detallaba: "Disciplinador de los tucumanos durante 12 años: al pobre que no lo aplaudía, le quitaba el plan social; a los estatales que no estaban en su línea política, los dejaba sin trabajo; a los empresarios que no eran generosos con él, no les daba obras". Estas palabras fueron acompañadas por la caricatura de un perro con la cara de Alperovich.