Un wichí se convirtió en el primer maestro jardinero indígena de Salta

Se llama Elerio María, tiene 31 años y se recibió de maestro de nivel inicial.

Elerio María, de la etnia wichí, se convirtió en el primer maestro jardinero de Salta.
Elerio María, de la etnia wichí, se convirtió en el primer maestro jardinero de Salta.

En los últimos meses, Salta fue noticia por la insostenible situación que se vive en el norte de la provincia, donde las comunidades aborígenes viven en la miseria y la pobreza es un denominador común entre los habitantes.

En medio de la declaración de la emergencia sociosanitaria y la visibilización a nivel nacional de las problemáticas que afrontan aborígenes y criollos, entre ellas la falta de agua potable y el aislamiento, surgió una noticia que genera esperanza.

Y es que un hombre de la etnia wichí se recibió y se convirtió en el primer maestro jardinero indígena de la provincia de Salta.

Elerio María, de la etnia wichí, se convirtió en el primer maestro jardinero de Salta.
Elerio María, de la etnia wichí, se convirtió en el primer maestro jardinero de Salta.

Se llama Elerio María, oriundo de Alto la Sierra en el Chacho Salteño, y tras conseguir su título de Técnico Agropecuario, que le dio trabajo con que sostenerse, comenzó a estudiar para maestro jardinero. Todos los días, y a pesar de las inclemencias del clima, condujo su moto 70 kilómetros hasta Instituto Superior de Formación Docente en Santa Victoria Este para asistir a clase.

Elerio hizo la primaria y secundaria en la escuela de Alto la Sierra y hoy hay grandes posibilidades de que pueda trabajar allí como maestro jardinero.

“Ahora hay posibilidades de que yo trabaje en esta misma escuela (la de Alto de la Sierra). Mientras se hacen esos trámites, trabajo ayudando a mi familia", manifestó, orgulloso.

(El Tribuno)
(El Tribuno)

Una de las problemáticas de la educación en el norte es que no contempla a rajatabla las diferencias culturales con los pueblos indígenas, entre ellas, el idioma, y en ese sentido el aporte de Elerio sería invaluable, ya que ayudaría a los niños wichí a adaptarse rápidamente al nuevo entorno.

"Los chiquitos de nuestra etnia se han criado en un ambiente muy distinto. Desde que salen de su casa atraviesan un proceso difícil. Llegan a la salita y tiemblan, no saben qué hacer, la docente les hablan en otro idioma. Y ahí es donde más se le complica al docente que se preparó en una ciudad", dijo el maestro en diálogo con El Tribuno.

"En esta zona conviven dos culturas (la indígena y la criolla), pero hay profesionales que quizá no están preparados para enseñar así. Por eso hay que trabajar fuertemente en contener a los chicos de los pueblos indígenas, y ahí el maestro bilingüe es un pilar fundamental. Pero necesita apoyo, falta acompañamiento para los auxiliares, que son el nexo con el alumno", indicó.

El maestro finalizó solicitando ayuda al gobierno para apoyar a los maestros bilingües: “Hay que pisar el acelerador a fondo y apoyar a los maestros bilingües. Que el Gobierno los vea y les de la ayuda que corresponde”.