Cadena perpetua para el joven que mató a los hermanos Ponisio para ocultar un robo

Se trata de una condena inedita en Santa Fe ya que fue solicitada en un juicio abreviado. El crimen ocurrió en octubre de 2015.

Los hermanos Ponisio fueron asesinados el 16 de octubre de 2015. (Archivo)
Los hermanos Ponisio fueron asesinados el 16 de octubre de 2015. (Archivo)

Un tribunal homologó este viernes el procedimiento abreviado sugerido por la Fisacalía que establece la cadena perpetua para Hernán Javier Por, el joven que el 16 de octubre de 2015 asesinó a los hermanos Javier y Agustina Ponisio en la casa de Castro Barros al 5500 en la que vivían con sus padres.

El imputado admitió ser penalmente responsable de los delitos de homicidio criminis causa agravado por el uso de arma de fuego en concurso real -dos hechos-, todo ello en concurso real con los delitos de robo calificado por el uso de arma de fuego y portación de arma de guerra en calidad de autor.

El pedido de juicio abreviado fue presentado oportunamente por el fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos, Florentino Malaponte, y constituyó un antecedente inedito en la tramitación de un proceso express para un homicio criminis causa que tiene la pena máxima.

Los hermanos Ponisio fueron asesinados en su casa en octubre de 2015.

La pretensión de la defensa del acusado para evitar una juicio tradicional fue la de ahorrarse un proceso prolongado que tendría el mismo resultado, de acuerdo a las pruebas recabadas.

Los familiares de las víctimas se expresaron de acuerdo al pedido de la defensa, que también consiguió el aval del fiscal Malaponte.

El tribunal que homologó la pena estuvo conformado conformado por los jueces de primera Instancia Gonzalo López Quintana, Juan Dónnola y Patricia Bilotta.

Hernán Javier Por, fue detenido en octubre de 2015 en la provincia de Santiago del Estero, luego de que se dictara el pedido de captura en todo el país. "En Rosario entré a la casa, le robé 25 mil pesos al pibe y lo maté. Después me encargué de la piba", indicó el acusado antes de ser trasladado, en una declaración que si bien fue informal, sirvió de preludio para los investigadores que luego lo llevarían a audiencia imputativa.

El matador ingresó a la casa a las 8.30, mató a Javier con tres disparos y a Agustina con dos balazos en la cabeza. Todos efectuados con una pistola calibre 9 milímetros. A las 8.40 se subió a su Fiat Siena color gris topo que había dejado estacionado en la puerta y se fue a toda velocidad, doblando por Sánchez de Bustamante hacia el oeste. La huida quedó grabada en un registro fílmico.

Mediante medidas investigativas llevadas adelante y a partir del peritaje y cotejo de vainas levantadas en la escena del hecho se concluyó que el arma para matar a los hermanos fue utilizada en otros dos hechos de homicidio.

El 16 de febrero de 2015 en Capital Federal, Pino ingresó a un supermercado, robó dinero en efectivo y le dispara a Ni Qui Fu, un comerciante chino de 40 años, provocando su muerte.

El 14 de abril de 2015 en calle Tucumán al 1500  de la ciudad de Buenos Aires fue encontrado el cuerpo de Claudia Marcela Sosa de 32 años, a quién Pino le había dado muerte el 8 de abril de 2015 en su vivienda.

Pino además fue condenado este año a la pena de prisión perpetua por un tribunal de la localidad Metán, provincia de Salta, por ser penalmente responsable del delito homcidio críminis causa en calidad de autor por un hecho ocurrido el 13 de julio de 2015 cuando el imputado ingresó a una estación de servicios en El Galpón, robó dinero en efectivo perteneciente a la recaudación del local y le disparó a Ariel Fernando Ríos de 28 años provocándole la muerte.