Dos agentes de la Guardia Urbana de Rafaela le salvaron a vida a un niño

Lucía Linares y Francisco Favre asistieron a un menor de 1 año y 10 meses, con síndrome de Down, que se había atragantado con una bolita. Le realizaron la maniobra de Heimlich.

Patrulleros de la GUR y de la Policía (imagen ilustrativa)
Patrulleros de la GUR y de la Policía (imagen ilustrativa) Foto: Prensa Municipalidad de Rafaela

Dos agentes de la Guardia Urbana de Rafaela le pudieron salvarle la vida a un niño con síndrome de Down, que se estaba ahogando tras haberse tragado una bolita. Su rápida intervención, con el conocimiento recibido en capacitaciones previas, permitieron que esto sea posible.

Cerca de las 17, recibieron el llamado de una mujer que llamó al 105, en el norte del barrio Mora, alertando una situación gravísima: un niño de 22 meses se estaba ahogando. Inmediatamente, desde la base de operaciones alertó al 107 y al 911. Fueron cuatro móviles de la GUR.

Los primeros en llegar fueron Lucía Linares y Francisco Favre. Éste, gracias a las capacitaciones recibidas, pudo realizar la maniobra de Heimlich (se abraza a una persona por detrás y se le aplica presión en el subabdomen para que expulse la obstrucción) y salvarle la vida al menor, quien pudo escupir la bolitaa

Francisco llegó primero: se encontró con la mamá desesperada, al punto tal que había ido de una vecina para pedir ayuda. Fue ella quien llamó al 105. “Tenía los labios morados”, describió el agente.

“Cuando llegamos hay que tener la cabeza fría y tener una reacción rápida. Trabajamos todos en conjunto, fue una emoción muy grande. Los familiares estaban llorando. Salió bien y hoy estamos todos muy contentos”, dijo Lucía.

Ambos, luego de haber estabilizado al niño, lo llevaron a la guardia pediátrica del Nuevo Hospital, junto a su madre.