Inseguridad en Córdoba: no inauguró y ya lo desvalijaron

La inseguridad crece de manera alarmante en toda la provincia de Córdoba y los delincuentes aprovechan el estado de indefensión en que viven los cordobeses para hacer de las suyas impunemente, como estos malvivientes que desvalijaron a un comerciante que ni siquiera pudo inaugurar su predio, por causa de la cuarentena.

Se trata un complejo de canchas de fútbol, que esperaba para poder inaugurar justo cuando inició la cuarentena y desde entonces sólo han sido visitado por ladrones en reiteradas ocasiones, según contó Gustavo González, dueño del complejo a la vera de la avenida Circunvalación.

"Es un lugar que quedó desolado y se han llevado hasta las ventanas, hemos tenido más de 20 robos en estos meses", contó a El Doce, este martes.

Sin poder abrir porque "justo el sábado que íbamos a inaugurar empezó la pandemia", dijo en alusión a la cuarentena instalada en el país por decreto presidencial, el 20 de marzo.

En el lugar, los maleantes se llevaron incluso hasta las chapas de un tinglado, en una muestra de la total impunidad con la que actúan: "hicimos una inversión de 7.000.000 de pesos para darle la comodidad a la gente y no nos dejaron arrancar".

En la seguidilla de robos se llevaron las chapas del quincho, las heladeras, puertas, ventanas y hasta la instalación eléctrica y las griferías con sus caños: "en un momento, vinimos y soldamos las aberturas y lo mismo las arrancaron y se las llevaron"; contó el emprendedor.

"Semana tras semana venimos y vemos qué se han llevado, esta semana se llevaron 200 metros de alambrado de las canchas, la bomba de agua y los reflectores y las ventanas y puertas de una casa que tenemos para el sereno", lamentó.

Para más indefensión todavía, contó que vio cómo se robaban las chapas y que pidió ayuda a la Policía pero se la negaron: "paré el auto y vi cómo estaban desmantelando el techo, entonces llamé a un patrullero y me dijeron que iban a hacer algo, pero se fueron. Al rato, paré a otro patrullero y se fueron... estuve media hora viendo cómo se llevaban las cosas", relató.