Senado: todo listo para la media sanción el proyecto K para nombrar más fácil al procurador

El proyecto propone que la mayoría simple sea suficiente, en lugar de la agravada.

Daniel Rafecas (Foto: Federico Lopez Claro)
Daniel Rafecas (Foto: Federico Lopez Claro)

El Frente de Todos (FDT) avanzó en la modificación de la ley Orgánica del Ministerio Público Fiscal (MPF), al firmar este viernes un dictamen que le pone punto final a los dos tercios de los votos requeridos actualmente para nombrar a su titular, el procurador general de la Nación, e instaura una exigencia más fácil de conseguir, la mayoría absoluta.

La encargada de informar cómo quedó el proyecto, que quedó listo para obtener la media sanción la semana próxima, sin ningún inconveniente, porque el oficialismo tiene mayoría propia en esa cámara del Congreso, es la ultrakirchnerista María de los Ángeles Sacnun.

En la comisión de Justicia, que preside otro ultrakirchnerista, el neuquino Oscar Parrilli, la senadora por Santa Fe señaló que, además terminar con los dos tercios para la designación, el proyecto establece que el procurador general de la Nación no podrá ser nombrado en años en que se elija presidente de la Nación.

Sacnun señaló que el procurador, según la iniciativa, tendrá estabilidad en el cargo hasta los 75 años y que ya no será vitalicio, como dice la actual ley Orgánica del MPF, sino que tendrá un mandato de cinco años, con una única prórroga por otros cinco años más.

Esta prórroga podrá realizarse sólo a pedido del Poder Ejecutivo y con un nuevo acuerdo del Senado, por mayoría absoluta.

Además, podrá prorrogarse el mandato del jefe de los fiscales federales “siempre que no supere los 75 años” de edad, señaló Sacnun.

Remoción

En relación con el mecanismo de remoción, la propuesta del oficialismo que enunció Sacnun fue verdaderamente poco clara.

La santafesina dijo que para echar al procurador “hay una vía que puede ser la de que el Poder Ejecutivo comunique a la Cámara de Diputados” su pedido de remoción por mal desempeño; que esa Cámara, a su vez, podría iniciar ese proceso “con la mayoría de los dos tercios de sus miembros”, y que para completarlo se requerirían los dos tercios del Senado. “Nos pareció que era importante mantener esa mayoría agravada [en el Senado]”, dijo.

Sin embargo, según dijo Sacnun, el proyecto establece la posibilidad de que la remoción del procurador también pueda ser solicitada por algún diputado nacional, en cuyo caso puede ser aprobada por esa cámara por mayoría absoluta, no dos tercios, aunque sí con los dos tercios del Senado.

Hasta el viernes a la noche el oficialismo no había hecho circular el dictamen, de modo que solamente quedaron los comentarios verbales de Sacnun, quien se preocupó por destacar que la propuesta del oficialismo se nutre de proyectos de los opositores Martín Lousteau, de la UCR; Lucila Crexell, del Movimiento Neuquino, y Alberto Weretilneck, de Juntos Somos Río Negro, quien, en rigor, no es un opositor sino un aliado del oficialismo.

Qué es la mayoría absoluta

El oficialismo se decidió por la denominada mayoría absoluta, que son 37 sobre 72 votos posibles, sabiendo que los dos espacios opositores de la Cámara Baja, Juntos por el Cambio, que tiene 25 integrantes, y el interbloque Parlamentario Federal, que tiene cuatro, no están dispuestos a apoyar para el cargo a Daniel Rafecas, el candidato que el presidente Alberto Fernández propuso hace 11 meses.

Daniel Rafecas y Alberto Fernández. (Foto: Prensa Alberto Fernández)
Daniel Rafecas y Alberto Fernández. (Foto: Prensa Alberto Fernández)

Lo curioso es que el propio Rafecas hizo saber hace unos meses que no aceptaría el cargo si se reduce por ley la mayoría de dos tercios para ser nombrado procurador. Ahora, si el FDT avanza con esta modificación a la ley Orgánica del MPF, que también debe ser convalidada en la Cámara de Diputados, hay que ver qué opina.

Este viernes, Sacnun expresó el deseo de que el próximo procurador, independientemente de que el acuerdo sea más fácil de conseguir, pueda ser avalado por “unanimidad”, lo que en este contexto es imposible.

El dictamen podría obtener la media sanción el próximo viernes, en lo que sería la última sesión del Senado del período ordinario de sesiones de un año accidentado, como consecuencia de la pandemia.

Tras esa aprobación, habrá que ver qué números hay en Diputados.

Por la corresponsalía de Buenos Aires.