Una pequeña mendocina enterneció al donarle sus ahorros a un compañero para su operación

Mía le dio todo el dinero que había juntado a Mateo, un compañerito de la escuela que debe someterse a una cirugía.

Mateo, Jazz y Mía, los protagonistas de la historia. (Foto / Los Andes)
Mateo, Jazz y Mía, los protagonistas de la historia. (Foto / Los Andes)

Una pequeña mendocina enterneció con el noble gesto de donarle el dinero que le había dejado el Ratón Pérez debajo de su almohada a un compañero que tiene que operarse. Se trata de Mía, quien no dudó en ayudar a Mateo para su tratamiento.

La historia de Mía y Mateo fue publicada hace unos días por diario Los Andes y se viralizó por la ternura que causó la niña con enorme corazón al tratar de ayudar a su amiguito que debe operarse de la vista.

Mateo Cabañez tiene ocho años, es oriundo del departamento de San Martín (al Este de Mendoza) y se someterá a una cirugía de vista, ya que sufre miopía y estrabismo, usa un parche permanente. Sus padres no tienen empleo fijo y deben reunir 80 mil pesos antes de los primeros días de diciembre.

Mateo, Jazz y Mía, los protagonistas de la historia. (Foto / Los Andes)
Mateo, Jazz y Mía, los protagonistas de la historia. (Foto / Los Andes)

Además, la familia del niño no tiene obra social por lo que Agustina Sosa, la mamá de Mateo, organizó rifas, bingos y venta de empanadas para recaudar el dinero.

Por otra parte, la maestra de 3° B del turno mañana de la escuela N° 1-008 General José de San Martín, Noelia Muressi, hizo una alcancía viajera para que los compañeros de Mateo y sus familias colaboren con el niño.

Los estudiantes y las docentes de la escuela se sumaron a la causa, pero la carta de Mía, la hermana de una de sus compañeras, conmovió a todos. “Hola, soy la ermana (sic) de Jazz y adentro está la plata de la donación para la cirugía de Mateo. Cantidad de plata: 100 pesos”.

La tierna carta que la niña escribió para su señorita.
La tierna carta que la niña escribió para su señorita.

La niña tiene 10 años, concurre al mismo colegio que Mateo y colocó sus únicos ahorros para ayudar al compañero de escuela de su hermana, Jazz.

Cuando vi la carta me emocioné y pude ver cómo se comprometen los niños. La tengo guardada”, dijo Agustina, para hablar de la inocencia de Mía.

“Niños solidarios con otros niños, poco o mucho ella puso un granito de arena, un gesto hermoso que habla de su crianza y su educación. Además es un gesto aún más loable porque van a distintos grados, casi no se conocen”, reflexionó, emocionada.

Quienes estén interesados en colaborar con Mateo pueden comunicarse con el celular 2634377010.