Armaron casas, plazas y hasta una iglesia en terrenos usurpados a una pareja de jubilados

El hecho se produjo en Cipolletti. Familiares de las víctimas reconocieron que quienes encabezaron la ocupación tuvieron la ayuda del Municipio.

Una pareja de jubilados de Cipolletti sufrieron la ocupación de los terrenos lindante de su casa. A pesar de las reiteradas denuncias que realizaron, aún no pudieron recuperar las tierras que compraron a base de esfuerzo y trabajo hace 25 años.

Según profundizó TN, se trata de Nora y Ramón, que viven en el barrio María Elvira de la localidad rionegrina y que a partir de marzo de este año, sufren la llegada de usurpadores.

Los terrenos que pertenecen a la familia de jubilados son tres hectáreas, en donde quienes están a cargo de la toma hicieron casas, una plaza y hasta una iglesia.

A través de redes sociales, se viralizó un video que grabó una de sus hijas en donde se ve la desgarradora escena con la que conviven sus padres.

Nora Quesada y Ramón Navarrete, jubilados de Cipolletti (Gentileza LMCipolletti)
Nora Quesada y Ramón Navarrete, jubilados de Cipolletti (Gentileza LMCipolletti)

"Estos son mis papás Nora Quesada y Ramón Navarrete a los cuales les han quitado injustamente la tierra. No han sido escuchados por parte del intendente y tampoco se acercó nadie del municipio. Les quietaron todo", declaró la mujer.

Por otra parte agregó que los usurpadores tuvieron la complicidad de de la municipalidad de Cipolletti. "Les hicieron calles, les trajeron tanques de agua, y en el invierno leña. Y hasta se dieron el lujo de tener una plaza".

"Si ustedes están escuchando vean a estos abuelos. Qué más quieren, que se encadenen en el medio de la plaza para que sean escuchados. Hacen y deshacen a su antojo. Dónde están los derechos para estos abuelos", disparó la hija de los ancianos.

Nora Quesada y Ramón Navarrete, jubilados de Cipolletti (Gentileza LMCipolletti)
Nora Quesada y Ramón Navarrete, jubilados de Cipolletti (Gentileza LMCipolletti)

A su vez, aclaró que los jubilados están encerrados en su casa porque viven amenazados. Tanto los alimentos como la medicación que toman se las llevan sus familiares, ya que Nora es diabética y Ramón tuvo tres ACV.

"Qué injusto es todo esto. Ellos están deprimidos. No pueden salir a tomar aire dentro de su campo. La gente que ocupó las tierras hasta construyó una iglesia", lanzó Amelia, nuera del matrimonio que sufrió la usurpación.