Aunque la mayor cantidad de casos de coronavirus se concentra hacia el sur, el problema de las fiestas clandestinas persiste a lo largo de todo el territorio santafesino. Este fin de semana la Policía identificó a más de 80 personas en reuniones ilegales que incrementan el riesgo de contagio durante la pandemia.
Reconquista, San Gregorio, Vera y Casilda fueron algunas de las localidades donde se dieron esos encuentros y hubo actuaciones similares en Rafaela. Las autoridades a cargo de los respectivos operativos labraron actas para los participantes por infracción a las medidas de aislamiento social, preventivo y obligatorio por COVID-19.
En la cabecera del departamento General Obligado, el procedimiento se llevó a cabo este sábado en un local de comidas de barrio Belgrano. Aproximadamente unas 30 personas habían asistido al comercio ubicado sobre calle 56 al 2300, el cual quedó clausurado.
En Casilda hubo 16 menores de edad demorados sobre un total de 22 personas halladas en un inmueble de Maipú al 2700, donde había una fiesta. En este caso, voceros de las fuerzas provinciales subrayaron que tres agentes sufrieron contusiones leves y un automóvil particular también fue dañado.
Volviendo al norte provincial, otras 30 personas fueron trasladadas a sede policial en Vera. Allí detectaron una reunión en Lezama y acceso al Hipódromo, donde además comprobaron que había expendio de bebidas alcohólicas.
En tanto, en San Gregorio, unos 80 kilómetros al sur de venado Tuerto, los efectivos de la zona interceptaron a dos sujetos provenientes de la localidad bonaerense de Alberdi. Ambos dijeron haber llegado para comer un asado, aunque se investiga una cadena de mensajes a través de Whatsapp que daba cuenta de la realización de una fiesta de disfraces.
Finalmente, en la localidad de Franck, la Policía detuvo a dos jóvenes de 18 años que participaban de una reunión social e identificó a varias personas que se negaron a salir del domicilio a la llegada de los agentes.