El viernes la Policía de San Luis realizó un allanamiento en una vivienda ubicada sobre la calle Aristóbulo del Valle, de la capital puntana, y encontraron una plantación de marihuana. En la casa vivían dos hermanas, de 25 y 28 años, estudiantes de medicina.
Las hermanas venían siendo investigadas hace unos ocho meses, aseguró la directora de la Dirección Lucha contra el Narcotráfico, comisario mayor Andrea Cura, a El Diario de la República.
Los investigadores descubrieron que ellas manejaban todo el proceso: cultivaban, cosechaban, secaban y comercializaban marihuana. Por orden del juez federal Juan Esteban Maqueda ambas están detenidas e incomunicadas Esperan ser trasladadas a tribunales.
Un especialista en botánica de la Universidad Nacional de San Luis (UNSL), que acompañó a los policías durante el allanamiento, explicó que lo producido en las flores de la planta alcanzaba para llenar entre 400 y 500 frascos de mermelada.
Las jovenes los vendían cada uno a unos $3.500, detalló Cura y especuló que solo en flores podrían haberse alzado con al menos un millón cuatrocientos mil pesos.
Según el parte oficial, la vivienda esta ubicada en la intersección de Aristóbulo del Valle y Sucre; y es propiedad de la madre de las jovenes, quien es ginecóloga.
En total, personal policial halló 80 plantas de cannabis Sativa, de las cuales 20 ya estaban cosechadas. También encontraron 958 semillas de la misma droga y 96 ramilletes en proceso de secado, dentro de una habitación de la casa.
"Esta vez, con la presencia del especialista de la UNSL se comprobó la producción. Como es una investigación que lleva ocho meses, el personal policial constató la comercialización y distribución de la planta en su totalidad", refirió Cura y añadió que "salvo la raíz, todo lo demás sirve, tanto las flores como las hojas y ramas".
Las jóvenes estudiaban medicina en la Universidad Católica de Cuyo y por la cantidad de plantas que había en el patio, sospechan de que la madre, y dueña de la vivienda, estaba al tanto de la actividad que realizaban sus hijas. Pero no hay pruebas de implicancia contra ella.
"Puede haber tenido un conocimiento, pero a quienes se les comprobó la comercialización es a las hijas. Si ha habido alguna participación (de la madre) en el delito, a eso lo determinarán el Juzgado Federal", aclaró la jefa policial.
Luego explicó que llegaron a las hermanas luego de que la policia detuviera a un estudiante universitario con cogollos (flores de marihuana). Allí comenzaron las investigaciones y descubrieron que quienes vendían también eran estudiantes.
"Aparentemente comercializaban entre los universitarios", explicó Cura y aparentemente las chicas vendían con la modalidad "delivery", incluso en algunas ocasiones también fueron compradores hasta el domicilio allanado.