En 72 horas se intoxicaron 16 sanjuaninos con monóxido de carbono

Llegó el frío a la provincia y con él muchas familias que corren riesgo por los braseros.

Los pacientes fueron ingresados al Hospital Guillermo Rawson, en la Capital de San Juan.
Los pacientes fueron ingresados al Hospital Guillermo Rawson, en la Capital de San Juan.

Este lunes, en la provincia de San Juan, el termómetro llegó a los 6° bajo cero y muchas son las familias que usaron braseros para calefaccionarse. Esto, causó accidentes en distintos puntos de la provincia y desde el Hospiltal Guillermo Rawson, informaron que ingresaron 16 personas intoxicadas con monóxido de carbono. Lo grave de la situación es que todo ocurrió en las últimas 72 horas. Según publicó Diario de Cuyo, la mayoría de los pacientes intoxicados son niños.

Este sábado en la tarde fue Claudia Mariela Carpio, de 47 años, la que llegó al nosocomio con sus dos nietitos, confirmó la Policía. Eran una nena de 8 años y su hermanito de 5 que se intoxicaron porque usaron un brasero para calentarse. El domingo por la tarde, también una mujer identificada como Alejandra Cruz, de 31 años, ingresó con su nena de 8 años, ambas intoxicadas con monóxido de carbono. El fin de semana, pero durante la mañana dos adultos, una adolescente y un nene de 7 llegaron a  Urgencias del nosocomio. Este lunes por la madrugada terminó internada Alicia Perla Rodríguez, de 34 años y con ella también lo hicieron sus hijas de 7 y cuatro años, también culpa de un brasero.

Los casos se suman al de una madre que, la semana pasada, se levantó desvanecida y logró rescatar a sus seis hijos que estaban desmayados adentro de la casa, todos intoxicados por un brasero.  Producto del incidente tres menores de 7,11 y 17 años pasaron dos días en observación por la cantidad de monóxido que habían aspirado  y se salvaron de milagro. Todavía, desde que comenzaron los días fríos, no hubo que lamentar muertes y desde el Ministerio de Salud Pública pidieron a la población extremar los cuidados, ventilar los ambientes y, en la medida de lo posible, no usar braseros.