Tras el crimen del taxista en Casilda al 2000, familiares, vecinos y compañeros de trabajo se concentaron en Junin y Formosa para exigir más seguridad y justicia por Mariano Esusy, de 61 años.
"La familia está destrozada", aseguró la nuera del hombre fallecido durante la madrugada de este Jueves Santo con un disparo en el pecho mientras trabajaba.
"Hace 30 años que manejaba un taxi, de toda la vida. Esta es una historia más de las que pasan todos los días", lamentó.
Rodada de carteles en pedido de más seguridad, la mujer continuó: "Fue un tiro de paso. De bronca porque no lo pudieron robar, con la mala suerte de que le pegaron en el pecho".
Respecto al hecho, el fiscal de Homicidios Dolosos, Adrián Spelta, detalló que los autores del asesinato no robaron las pertenencias del taxista porque "no dio posibilidad la víctima" al acelerar el vehículo.
Del preinforme de la autopsia de Esusy se desprendió que el cuerpo presenta un golpe en el costado izquierdo de la frente. "Hubo un intento de forcejeo o de ataque físico por parte de los homicidas. En la huida se desencadena el disparo y la posterior muerte del taxista", indicó el funcionario del Ministerio Público de la Acusación (MPA).