Este viernes por la mañana organización Pro Vida se manifestaron frente al hospital Iturraspe para manifestar su apoyo a los profesionales de la salud objetores de conciencia.
"Es un mimo que uno recibe porque nosotros tenemos bien claras nuestras convicciones y actitud; pero a veces cuando se nos castiga y critica tanto el hecho de que la gente reconozca nuestro trabajo es muy importante", dijo el doctor Samuel Seiref, jefe del Servicio de Ginecología.
Identificados con pañuelos celestes y banderas argentinas se manifestaron en contra del aborto y sostuvieron que "esta ley es ambigua".
"No se le permite al médico objetar conciencia. Esto hace mucho ruido porque si es una decisión del gobierno estar a favor del aborto, no me pidan a mí que mate. Yo no me eduqué para matar", sentenció Seiref.
Polémico aborto
Una joven santafesina de 28 años fue atendida en el hospital de la capital provincial durante el pasado fin de semana. Ella habría solicitado la interrupción de un embarazo de 24 semanas porque no podría mantener el bebé económicamente. El problema se presentó porque el personal del nosocomio que se encontraba en dicho momento era objetor de conciencia por lo cual no realizaron la práctica y se debió llamar a una médica de Rosario.
La joven había tenido dos partos anteriores por cesárea, situación que habría complicado su cuadro que terminó con una ruptura del útero luego de que la profesional le suministrara un medicamento.
Ante la complicación la paciente fue trasladada en forma urgente al hospital Cullen. Allí se constató el abortó del bebé que ya tenía uno de sus miembros afuera de la madre.
