Este lunes se desató una batalla campal en Maciel entre miembros del oficialismo y la oposición. Todo comenzó con un pedido de auditoría a la nueva gestión y despidos.
La grieta política empezó a ensancharse en febrero cuando el presidente comunal denunció un "golpe constitucional". En ese entonces, Pedro Tobozo habló de la conformación de una alianza en su contra para destituirlo.
En un nuevo episodio, esta semana el responsable del Ejecutivo salió de la reunión extraordinaria convocada por la comisión comunal con la boca ensangrentada y sin un diente. La vicepresidenta Patricia Bessonart, por su parte, sufrió golpes en la cabeza y brazos.
El problema surgió a partir del pedido de la oposición para despedir a los asesores legales de la comuna, al contador y a la jueza de faltas. Además, solicitaron paralizar los pagos por caja y la intervención del Gobierno provincial a través de una auditoría, a seis meses del comienzo de la gestión.
"Están acusando directamente al tesorero, quien mantiene diferencias con integrantes de la comisión comunal. Dicen que les pegó a los dos. La vicepresidenta está asustadísima por los golpes que recibió", contó Carlos Ramírez, secretario general de Adetram en diálogo con Criterio Informativo.
"Habíamos presenciado discusiones, pero nunca un nivel de agresión semejante", añadió. "Por bronca política están quemando medicamentos en el basural. Han descubierto cajas de remedios en buenas condiciones que iban a destruir, con el propósito de desabastecer el Samco", denunció el gremialista.