El Gobierno nacional confirmó que se levantarán las cabinas de peaje en la Ruta Nacional 11, lo que afectará directamente a 120 trabajadores santafesinos e indirectamente a otros 200. Advierten que la medida dañará severamente las economías de muchos pueblos provinciales.
El año pasado se pusieron en marcha importantes obras para transformar la Ruta Nacional 11 en autopista, al tiempo que se avisó que se levantarían los peajes de todas las vías que no fueran autopistas o autovías.
Al vencerse la concesión de la 11, se pone en marcha esta medida resistida por los empleados nucleados en el gremio Sutracovi. "Van a dejar sin trabajo a 120 compañeros repartidos entre Florencia, Nelson, Reconquista, y Videla", indicó Leandro Bond, titular del sindicato.
En diálogo con Vía Rosario, añadió que el aporte económico de estas personas en sus pueblos es sumamente relevante. "Esto origina un gran problema, porque muchas localidades dependen de estos ingresos para mover su economía", apuntó y añadió que a ello se suman los 200 puestos laborales que indirectamente podrían perderse.
Bond adelantó que lo mismo pasará con las rutas nacionales 33 y 34. "Plantean no cobrar peaje hasta que se termine de construir la autopista, lo que es una locura por los puestos de trabajo perdidos y la falta de mantenimiento que tendrán estas vías", explicó.
Y el dato no es menor, porque estas dos últimas rutas son las de mayor siniestralidad en Santa Fe. "Si nadie realiza tareas de balizamiento, ni de mantenimiento, podrían aumentar drásticamente los accidentes", advirtió Bond.
Por lo pronto, la semana que viene habrá una asamblea de trabajadores de la 11, con pedido de audiencia al gobernador Miguel Lifschitz y el lanzamiento de un plan de lucha.
