Mientras el Gobierno provincial elogia la tarea de las fuerzas de seguridad para desbaratar bandas dedicadas a robos violentos, Villa Gobernador Gálvez ya superó largamente la cantidad de homicidios del año anterior y confirmó así un repunte que contrasta con la tendencia a la baja de los crímenes con víctimas fatales en la región.
El ataque a balazos que terminó con un hombre de 40 años muerto y una nena de 9 herida fue el último de los 19 casos confirmados hasta el momento por el Ministerio Público de la Acusación (MPA) a lo largo de 2017. El crimen de Claudio Méndez fue el octavo durante la segunda mitad del año, si bien en el último trimestre hubo apenas tres hechos registrados.
En comparación con los 11 asesinatos relevados en el período anterior, el total parcial implica un aumento interanual del 72%. Más allá de que todavía se encuentra lejos de las 32 personas ultimadas en 2013, es la primera vez que la tasa refleja un incremento en relación al año previo desde aquel pico.
La escalada de violencia que marcó a fuego la gestión del ministro de Seguridad provincial Raúl Lamberto durante la gestión del gobierno de Antonio Bonfatti se redujo levemente en 2014, cuando se relevaron 24 homicidios en Villa Gobernador Gálvez. El resultado fue el preludio de una baja mucho más pronunciada. En los 12 meses siguientes hubo 11 asesinatos y la tasa cayó más de un 50%, pero la situación parece haberse revertido a contramano de lo que ocurre en Rosario y otras localidades cercanas.