Serios incidentes se registraron en la asamblea de Newell's, que terminó con sillazos, heridos y denuncias de amenazas de muerte. La policía debió montar un operativo de seguridad para custodiar la salida.
La previa a la reunión ya venía caliente por acusaciones cruzadas y la advertencia de agrupaciones opositoras por presuntas amenazas en caso de que no aprobaran la memoria y balance del club, que arrojaba un importante déficit.
Desde las primeras horas de la tarde, el estadio cubierto del club contaba con un vallado, y cuando arrancó la asamblea las puertas se cerraron y la policía esperó afuera. Pero todo se demadró tras la votación.
Según la oposición, la dirigencia no avaló el pedido del pase a un cuarto intermedio y una patota comenzó a agredirlos. "Volaron sillas y golpes, hubo gente herida que terminó hospitalizada. A mí me amenazó el vicepresidente Cristian D'Amico", indicó Daniel Giraudo de ADN Leproso.
Por su parte el propio D'Amico rechazó esta versión, y acusó al propio Giraudo y a Federico Ripani, del Movimiento de Pertenencia Leprosa, de instigadores. "Si fueron amenazados como dijeron, lo deberían haber denunciado penalmente y no en los medios, porque así contribuyeron a generar un clima perverso", manifestó a Canal 3.
Según el directivo, estos referentes de agrupaciones opositoras provocaron los incidentes luego de perder dos votaciones en asamblea. "Están buscando la intervención del club que nos conduciría a un desastre. Piensan en su interés personal y no en Newell's", disparó y añadió que la comisión denunciará el hecho y aportará filmaciones de lo ocurrido.
Tras el escándalo, la oposición se retiró del lugar y la asamblea continuó su curso, sin embargo se especula con que la Inspección General de Justicia la declararía nula.
