La investigación sobre una banda de extorsionadores conectada al juego ilegal en Rosario tiene como uno de los principales protagonistas a Patricio Serjal. Este lunes la Justicia decidió que permanezca bajo prisión preventiva por 90 días más y los encargados de la causa apuntaron que tuvo un incremento patrimonial millonario desde que asumió como fiscal regional.
"Identificamos un desfasaje financiero significativo", plantearon desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA) luego de la audiencia en la que se aprobó el pedido para mantener la medida cautelar dictada a principios de agosto. El análisis económico en curso por parte del organismo anticipa un aumento estimado de $2.500.000 a partir de abril de 2017.
El fiscal Luis Schiappa Pietra aclaró que todavía no terminaron el trabajo de revisión de los gastos e ingresos de su antiguo jefe. Sin embargo, creen que los números mejoraron producto del cobro de coimas a cambio de protección a los delincuentes y dentro del escenario provisorio que describieron asoma la compra de un terreno.
El representante del MPA aseguró que el objetivo de la pesquisa es "dar cuenta de un fenómeno criminal mucho más grande" en torno al funcionamiento de la organización cuyo liderazgo atribuyen a Maximiliano Díaz. A "Cachete" lo presentan como el autor de las amenazas contra el empresario Leonardo Peiti, quien declaró como arrepentido e incriminó tanto a Serjal como al exfiscal Gustavo Ponce Asahad y al empleado judicial Nelson Ugolini. Este último es el único de los tres que permanece en libertad.
Finalmente, Schiappa Pietra consideró que las maniobras que pretenden probar se refieren a un circuito delictivo que se repite en toda la provincia. "Esto funcionó porque tenían el respaldo no solamente de las agencias policiales sino también del personal del MPA", concluyó.