Reunieron en Rosario a madre e hija misionera separadas durante casi un mes

María Isabel pasó semanas sin poder viajar para llevarse a la nena de regreso debido a la pandemia.

La mujer volvió a abrazar a la pequeña Dana tras un operativo coordinado en la Terminal de Ómnibus Mariano Moreno. (Alan Monzón)
La mujer volvió a abrazar a la pequeña Dana tras un operativo coordinado en la Terminal de Ómnibus Mariano Moreno. (Alan Monzón)

Una mujer de Misiones tardó 28 días en reunirse con su nena de 2 años tras la muerte de su hija mayor por un tumor. La historia que conecta Posadas con Rosario concluyó este martes con el emotivo reencuentro en plena cuarentena gracias a la ayuda de la enfermera a la que conocieron en la Cuna de la Bandera.

La pequeña Dana pasó casi un mes viviendo con su tía en la vecina ciudad de San Lorenzo tras perder a su hermana de 4 años. La niña había sido derivada desde el norte en septiembre y falleció el 17 de marzo, tres días antes de que se decretara el aislamiento social, preventivo y obligatorio por la epidemia de coronavirus.

Durante los meses que pasó en la ciudad por el tratamiento de Bianca, la familia llegó a conocer a María José Torres, quien tuvo un papel protagónico en la iniciativa para cerrar la brecha de 900 kilómetros entre María Isabel y su hija menor.

La mujer que trabaja en el área de terapia pediátrica del Hospital Italiano le contó a El Ciudadano que se enteró de la separación por un estado de Whatsapp de la mamá. Así supo que la mujer y su marido tuvieron que volver a Misiones sin Dana porque la obra social sólo cubría el traslado de dos personas. Después la emergencia sanitaria frustró el plan de hacer un nuevo viaje, así que la enfermera decidió pedir ayuda el último jueves.

El caso llegó a oídos de las autoridades locales y provinciales, quienes se encargaron de contactarse con la madre de la nena. Cinco días más tarde, el operativo con las medidas sanitarias correspondientes permitió ver a María Isabel y su hijita abrazadas en la Términal de Ómnibus Mariano Moreno para regresar juntas, ahora sí, a Posadas.

Fotografía: Alan Monzón.