El empresario Ariel Scharf, imputado por la muerte del bajista Adrián Rodríguez en el Café de la Flor, pidió nuevamente a la Justicia que se le permita acceder a la suspensión del juicio a prueba por el caso que investiga desde 2015 el Ministerio Público de la Acusación (MPA).
Los abogados del dueño del bar ya habían solicitado la probation hace casi dos meses y la medida había sido rechazada en primera instancia por el juez Hernán Postma. Ante el recurso de apelación de los defensores, será ahora la Cámara Penal la que decida sobre la situación del acusado por homicidio culposo.
Tal como había ocurrido en abril, el nuevo pedido fue desestimado por la fiscal Valeria Piazza Iglesias y la querella que patrocina a la familia del músico de Raras Bestias, más allá de que Scharf propuso resarcir económicamente a los mismos.
La situación procesal del empresario es la única que sigue bajo la lupa a casi dos años del trágico recital en Mendoza al 800, donde el muchacho de 35 años falleció luego de recibir una descarga eléctrica mientras tocaba en el escenario.
En tanto, ya esperan fecha para juicio oral el inspector municipal Pablo Akerman y el electricista Pablo Campodónico. Para el titular del Café de la Flor, la Fiscalía había pedido una pena de cuatro años de prisión efectiva y diez de inhabilitación para trabajar en el rubro.
