Se multiplican los pasajeros varados por la niebla en el aeropuerto de Fisherton

La escasa visibilidad que se manifestó el fin de semana y se replica este lunes hace que la aerostación restrinja operaciones. Hay cerca de 300 viajeros afectados.

La niebla complicó una vez más las operaciones en el Aeropuerto Internacional Rosario \
La niebla complicó una vez más las operaciones en el Aeropuerto Internacional Rosario \

El aeropuerto de Rosario sufre serios perjuicios en las jornadas que hay poca visibilidad. Es una realidad que se conoce, aunque cuando se suman más de dos días de nieblas, los trastornos para los pasajeros se profundizan.

Este lunes la aerostación amaneció sin operaciones y con algunas conexiones canceladas o reprogramadas, situación que complicó a aún más el panorama para los viajeros que pretendieron volar durante el fin de semana y ya tuvieron problemas.

Ocurre que cuando un banco de niebla se presenta sorpresivamente -normal en el otoño en el Litoral- los controladores aéreos no pueden más que cerrar el aeropuerto para aterrizajes y despegues y eso estuvo pasando desde este domingo en la madrugada y se repitió a diferentes horas.

La niebla complicó una vez más las operaciones en el Aeropuerto Internacional Rosario "Islas Malvinas". (@rosario_vuela)
La niebla complicó una vez más las operaciones en el Aeropuerto Internacional Rosario "Islas Malvinas". (@rosario_vuela)

Hubo aviones que no pudieron aterrizar y no les quedó otra que buscar aeropuertos alternativos. El panorama demoró incluso las partidas. Solo este lunes por la mañana había cerca de 300 pasajeros varados, quienes en algunos casos pretendían ser reubicados por cancelaciones tanto el sábado como el domingo.

Para los pasajeros que nos son oriundos de Rosario, las aerolíneas ofrecen hoteles para calmar la espera, aunque no son pocos los que han perdido conexiones y días de alojamiento ya abonadas en destinos de vacaciones.

El Aeropuerto Internacional Rosario "Islas Malvinas" está en pleno proceso de licitación de equipamiento que permita reducir los mínimos de operación en días de escasa visibilidad, situación que se repite en forma recurrente en el otoño y el invierno. De esa forma podrían reducirse la tasa de retrasos y cancelaciones.