Dos emprendedoras llevan adelante una empresa textil ecológica

Se llama Eco.Pa.Cha y las emprendedoras son Guadalupe Piqué, de Bahía Blanca y Natalia Romano, de Río Gallegos.

En el marco de la Campaña Mundial "A limpiar el Mundo" que se festeja anualmente en el mes de septiembre, la Secretaría de Estado de Ambiente, durante este mes pone en relevancia las iniciativas y proyectos que tienen como finalidad concientizar y mejorar la calidad de vida de los santacruceños.

Razón por la que conoceremos la historia de dos emprendedoras que a pesar de la distancia geográfica que las separa, han encontrado la manera de ensamblar ideas y propósitos que colaboran con el cuidado del ambiente y a la vez nos cautivan con los novedosos diseños de sus productos.

Guadalupe Piqué es de Bahía Blanca, artista plástica en constante búsqueda de innovaciones artísticas que tienen como principal eje el cuidado del ambiente, y Natalia Romano, de Río Gallegos, profesora de artes de la localidad con las mismas inquietudes ecológicas.

Forjaron amistad y al poco tiempo idearon un emprendimiento cuyas bases surgen a partir de los conceptos "sustentable y ecológico". La idea ya se llevaba adelante en Europa y solo fue cuestión de poner manos a la obra para investigar y aprender todos los detalles que implementarían en éste sueño en conjunto que se llamaría "Eco.Pa.Cha".

El cuidado de la tierra Guadalupe contó que se contactaron con Natalia, que es de Rio Gallegos, en el Complejo Cultural en el año 2019 participando de una muestra con un grupo de gente, en lo que se llamó "Campamento Curatorial". "Ahí nos conocimos, las dos siempre individualmente buscando el contacto con la naturaleza y que tenga que ver con el desarrollo con nuestra obra", agregó.

"Ahora en pandemia decidimos hacer algo juntas y siempre con la línea natural que tememos cada una en su proceso personal. Ideamos esto como algo propio. Pero ya existe, no lo inventamos nosotras. Es algo de lo que nos inspiramos de Europa, en España, donde hay un montón de gente que lo está haciendo.

Nosotras el distintivo de nuestros ecopachas, es que teñimos todas las telas con tintas naturales, las cuales van de desechos que son las cascaras de cebollas y cascaras del carozo de palta, hasta la recolección", relató.

Por otra parte, explicó el significado del nombre del emprendimiento. Sobre los cual, destacó: “Pacha porque estamos programando cuidar la tierra, aunque sea con mínimos actos que hagamos, y Eco, por ecológico. Así que estamos haciendo envoltorios de cera de abeja, que básicamente son telas que están tratadas con cera de abeja y resina de pino, lo cual genera antibacterias y es resistente al agua”.

Productos libres de químicos

Natalia señaló que el emprendimiento surgió de repensar las prácticas cotidianas y su impacto en la naturaleza y en la ecología.

"Por eso todas nuestras telas son 100 por ciento de algodón tratadas de forma ecológica como el eco prime, como es esto de la impresión de hojas y elementos de la naturaleza por los tintes naturales, como estos que son tintes provenientes de la naturaleza y que están hechos sin ningún tipo de químicos", detalló.

"El producto que estamos promocionando ahora, son los eco envoltorios que sirven para frisar, guardar, o transportar alimentos con telas. Las telas están algunas teñidas, alguna esta sin teñir, se abren y con el calor de las manos va tomando forma de aquel elemento que queremos guardar", describió.

"Cuando lo terminamos de utilizar lo que hacemos es lavarlo con un jabón muy suave, tipo jabón blanco y un poco de agua fría, se deja secar y se vuelve a usar. Lo que hace esto es que con el calor de nuestras manos toma la forma y reemplaza a cualquier tipo de envoltorio o tapa. También podría servir para un frasco que no tenemos la tapa, o una tapa de táper que perdimos, envolver panes, o podemos hacer bolsitas que son como sobres que se usa para transportar, adentro llevar snack, galletas, cualquier tipo de cosa", detalló respecto al uso.

Datos relevantes

La fabricación de los productos que se llevan adelante, tanto en Buenos Aires como en Rio Gallegos, Santa Cruz. Tanto Natalia como Guadalupe se abastecen recíprocamente de los productos, en caso de que alguna se quede sin stock, e incorporando continuamente nuevas ideas que mejoren la calidad de los envoltorios.

Eco.Pa.Cha tiene distribución gratuita de sus productos así que las emprendedoreas esperan que se sigan sumando a esta propuesta que es ecológica, sostenible y que además embellece la cocina. Se puede tomar contacto con los productos a través de Instagram y del Facebook Eco.Pa.Cha.