Esta mañana se conocieron novedades de relevancia relacionadas a la investigación que lidera la fiscal, Claudia Ríos, por el homicidio del joven Emir Cuattoni (15) quien fue baleado el 17 de abril del 2016 en el parque Benegas y murió 42 días después.
Después de la imputación, un hombre llamó al 911 y señaló que conocía a Gustavo Seré que habría dicho una frase que lo vinculaba al crimen de Cuattoni.
Se trata de un ex empleado que pidió declarar en la causa y dijo que después del hecho él iba en el auto con Seré y este le confesó "acá me maté un guacho", esta fue la declaración que dio el testigo.
Lo cierto es que la justicia tardó un año en encontrar un sospechoso: Gustavo Seré un instructor metalúrgico sospechado de ser el autor del disparo contra el adolescente.
Se cree que Cuattoni no debería estar muerto ya que el disparo no era para él si no para un amigo que caminaba junto con él en cercanías del parque Benegas en Godoy Cruz.
Durante el último año, fue muy complicado demostrar la autoria de Seré ya que solo se cuenta con declaraciones. Sin embargo, la contundencia de los nuevos testimonios por parte de testigos, se convierten en una pieza clave para encerrar al metalúrgico.
Primero apareció un chico de 18 años que dijo haber visto a Seré en la escena del ataque. Este testigo declaró después de un año y reconoció que había reconocido a Seré en ese lugar porque también lo había visto en una fiesta días antes. Este testimonio finalmente motivó la detención de Seré. que además fue imputado y enviado al penal de San Felipe, donde le dieron una paliza.
Mirá también: Anotaciones en un cuaderno complican a Seré acusado de matar a Cuattoni
Mirá también: Cayó un empresario por el asesinato de Emir Cuattoni